(Su Señoría el Juez Peinado)
Gracias a Dios que en España aún existen magistrados como su señoría el Juan Carlos Peinado, un juez con más de treinta años de servicio a la justicia que no se intimida ni achica ante los poderosos ni se deja doblegar por las presiones políticas. Su trayectoria se ha caracterizado por la persistencia y el rigor, y en la actualidad continúa demostrando estas cualidades en la causa que instruye desde hace casi un año y medio contra Begoña Gómez, esposa del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez. No nos hayamos antes un juez novado que acaba de aterrizar en la carrera judicial, sino que lleva treinta años de ejercicio, tiene 70 años de edad y estará ejerciendo hasta los 72 años.
El magistrado Peinado, lejos de desistir, ha buscado diversas vías para elevar el caso hasta el Palacio de la Moncloa donde se acercó solo en su coche a tomar manifesción a Pedro Sánchez en su despacho de la presidencia del Gobierno. Tiene muy claro que todo somos iguales ante la Ley. En el curso de la investigación mantiene imputado al delegado del Gobierno en Madrid, Francisco Martínez, y ya intentó imputar en su momento al actual ministro de Justicia, Félix Bolaños. Ahora, su atención se centra en el cargo de secretario general de la Presidencia del Gobierno, responsabilidad que en diferentes etapas han ocupado precisamente Martínez y Bolaños.
En su última resolución, dictada este miércoles, el juez solicita información sobre quiénes han sido secretarios generales de Presidencia desde que se contrató a la asesora de Begoña Gómez. Lo llamativo es que, pese a haber interrogado ya a dos de ellos —Bolaños y Martínez—, considera necesario ampliar la investigación a fin de esclarecer todos los detalles que rodean este asunto.
Con esta decisión, el juez Peinado confirma una vez más su compromiso con la independencia judicial y su empeño en llegar hasta el fondo de los hechos, sin importar la relevancia de las personas implicadas. Su actuación es interpretada por muchos como un signo de esperanza en la solidez del Estado de derecho, en un momento en el que la ciudadanía demanda con urgencia transparencia y justicia frente a la política y sus posibles abusos.
Estos ejemplos de trabajo persistente dignifica a la Justicia española, y por ende garantes de dignidad y tesón, y que lo españoles podemos estar tranquilos con que se cumpla a Constitución, nada más que queda mochuelo sea buscado y encontrado en el hueco oscuro de su olivo. Es España hacen falta muchos jueces como Peinado sin miedo al poder.
Ramón Palmeral
Pintor y escritor