ARTICULOS DE OPINION


Revista digital de arte, cultura y opinión en Alicante. Enlace con POESIA PALMERIANA. En estas páginas no podemos estar ajenos a lo que pasa en España ni en el mundo. Dirigida por el escritor, poeta y pintor Ramón PALMERAL. Los lectores deciden si este blog es bueno, malo, o merece la pena leerlo. El periodismo consiste en decir lo que a algunos no les gustaría leer.

miércoles, 14 de octubre de 2020

Hoy 9 de octubre día de la Comunidad Valenciana o Levante, por Ramon Palmeral

 

                   (Nueva propuesta de bandera de la Comunidad de Levant má integradora)

Por Ramón Palmeral

El día de la Comunidad Valenciana se celebra el día 9 de octubre porque fue el día en que Jaime I el Conquistador (Jaume I) de 1238 entró definitivamente en la ciudad de Valencia, cuando al fin consiguió la rendición del rey musulmán Zayyan ibn Mardanish, después de meses de asedio.

Sin embargo, nunca oirás decir a un alicantino o a un castellonense que son valencianos. Este apelativo nos suena extraño y centralizado,  es ciudad  donde están los despachos del gobierno de Generalitat Valenciana. Por lo tanto propongo cambiar el nombre de Comunidad Valenciana por Comunidad Levantina, y con otra bandera más integradora de los territorios de las tres provincias levantinas. Una confusión que se ha de solucionar ya y ahora.

Oirás a un sevillano, malagueño o granadino decir que es andaluz, o a uno de Lugo o de Orense decir que es gallego, o a un bilbaíno decir que es vasco, o uno de Barcelona decir que es catalán; pero nunca jamás oirás decir a un alicantino o a un castellonense que es valenciano. Este mal trago se debe al error del Estatuto de Autonomía de 1982 al nombrar Comunidad Valenciana, denominación que no es integradora, porque  debió llamarse Comunidad Levantina, que es la lógica:  Castellón, Valencia y Alicante.

El territorio de la comunidad actual coincide en «su mayor parte» con el del antiguo e histórico del Reino de Valencia, reino creado dentro de la Corona de Aragón por Jaime I el Conquistador,  rey de Aragón y conde de Barcelona, que abarcó desde la reconquista de Valencia en 1238 hasta 1707 año de la derrota la batalla de Almansa, en que, con la promulgación de los Decretos de Nueva Planta para los reinos de Aragón y Valencia sus instituciones fueron abolidas. A finales del siglo XIX se conocía como Región Valenciana a partir del Estatuto de Autonomía el término de «Comunidad Valenciana» se ha extendido y popularizado. También se usa Valencia, aunque este último puede llevar a confusión con la ciudad y la provincia homónimas.

Las diferencias lingüísticas en Alicante no son ni casuales ni por olas de inmigraciones, sino que derivan del tratado medieval  de Almizra en 1244 entre las fronteras pactadas entre aragoneses y castellanos. El Tratado de Almizra lo firmó el rey aragonés Jaime I el Conquistador y el infante castellano Alfonso, hijo de Fernando III y posterior rey Alfonso X el Sabio que también tenía Murcia. Por ello, media provincia al sur de Biar (Alicante) habla castellano desde hace ocho siglos y la otra mitad al norte habla valenciano, que no catalán. Actualmente, por la temida «contaminación política de la izquierda» de la que tanto habla nuestro historiador Vicente Ramos, se ha impuesto el estudio y uso obligatorio del valenciano en las escuelas y universidades de Alicante, al menos oficialmente, pero contra natura histórica.

Por eso digo que para una mejor y progresiva identidad regional y comunitaria de integración, nosotros los Levantinos (Castellón, Valencia y Alicante), deberían votar en referéndum el cambio de la denominación de nuestra Comunidad. Entre los levantinos han surgido dos corrientes político-sociales como el blaverismo y el fusterismo.

Dos posicionamientos opuestos, porque el blaverismo es opuesto al nacionalismo valenciano o fusterismo que deriva hacia el pantacatalanismo o pro-catalana e integración o reunificación independiente de los llamados países catalanes: Cataluña, Levante y Baleares. Por ello, cuando hablo de nosotros los levantinos nos entendemos mejor de que al decir valencianos. El fusterismo deriva de la tesis del escritor valenciano de Sueca, Juan Fuster (escribía en catalán) la intelectualidad y de los universitarios de la década de los 60​ por su componente claramente antifranquista, que a su vez contagiará a toda la izquierda política a favor del pantacatalanismo del regionalismo valenciano. Cuando Juan de la Cruz Fuster Ortells  publica en 1962 su ensayo Nosaltres, els valencianos argumenta las claves del nacionalismo valenciano, y encuentra en Alicante a un gran opositor, a Vicente Ramos quien siempre defendió en Unión Valenciana, a una Comunidad dentro de España y no nacionalista ni tendente al secesionismo como ocurre hoy día en Cataluña.

Por lo comentado propongo cambiar el nombre de Comunidad Valenciana por otro nombre más integrador como Comunidad Levantina y con una nueva bandera también más integradora y diferencial. En un populismo exacerbado del pantacatalanismo, los españoles, de otras Autonomías, no saben distinguir entre la bandera de Valencia y la Catalana, por lo de las 4 barras rojas sobre amarillo del antiguo reino de Aragón. Y debemos diferenciarnos completa y limpiamente, porque  los levantinos no somos catalanes, por la deriva independentistas que estos han tomado, y que, por añadidura nos podría perjudicar en nuestra economía futura.

  Se esta imponiendo las lenguas autonímicas como instrumento de nacionalismo independiente.

IMPOSICIÓN DE LENGUAS VERNÁCULAS O AUTONÓMICAS

 

IMPOSICIÓN DE LENGUAS VERNÁCULAS O AUTONÓMICAS

 

Pienso que el nacer en un territorio, no da derecho de propiedad de ese territorio.

Estos ciudadanos se creen que por nacer en un territorio éste les pertenece.

Es inconstitucional imponer una lengua vernácula o autonómica a otros residentes no hablantes, en el mismo territorio, cuando existe una lengua común.

Es lo que están haciendo nacionalistas catalanes, vascos, valencianos o levantinos, gallego o baleares, a los residentes no hablantes, nacionales o extranjeros.

Por qué si es anticonstitucional se cede. Son maniobras nacionalistas independentistas.

Soy partidario que voluntariamente el que quiera que la aprenda y practique pero no se imponga legalmente, por los Estatutos de Autonomías.

En Cataluña, está mal visto hablar en castellano o español

La lengua debe ser una opción nunca una imposición.

Estoy de acuerdo que se proteja, pero no que se imponga como sucede es estos tiempos  de valencianización del territorio hasta desde párvulos hasta llegar a las Universidades, educación, instituciones.

Las lenguas están subvencionadas con los gobiernos autonómicos, porque le interesa para su fines nacionalistas.

Las 17 autonomías integran el territorio español, no son independientes. El federalismo un un grave error, por la disgregación.

………………..

Ramón Palmeral, es español, y viene en Alicante desde hace 40 años, y sabe de lo que habla.

La crisis de la metalurgia vasca durante la II República

 

    Altos hornos de Bilbao, 1932


Ramón Palmeral

 

   No todo en las repúblicas son parabienes. España camina por un peligroso e incierto camino
 hacia una III Republica por olvidar el pasado, que puede acabar muy mal por el parón de la
 economía de mercado.  Sin embargo, hemos de recordar lo que sucedió con la metalurgia de acero 
en el País Vasco en 1932 al 36. Lo sabemos por los trabajos de Gabriel Jackson (1921-2019)
  autoridad mundial en el conocimiento de la II República Española y en la Guerra Civil, 
hispanista estadounidense, que escribe páginas 96 a 97 de su libro 
La República española y la Guerra Civil, en Biblioteca Historia de España, Madrid, 2005,
 escribe lo siguiente:
 

   «Durante  toda la época republicana, la industria vasca del acero sufrió una grave crisis, en parte debida a las condiciones mundiales y en parte a la política del Gobierno. La industria se había expansionado y gozado de buenos precios y tarifas protectoras durante la década de los 20. Los arma­mentos para la guerra de Marruecos habían sido durante largo tiempo una buena fuente de ingresos, y cuando la guerra se acabó, Primo de Rivera comenzó la modernización y extensión de la red ferroviaria [para lo que se necesitaba acero], que continuó ofreciendo un gran mercado para el acero vasco. La República, sin embargo, no siguió la política ferroviaria del dictador [Primo de Rivera]. En gran parte por consejo de Indalecio Prieto, el Gobierno [de la II República] se decidió por continuar la construcción de carreteras, haciendo así que la construcción de ferrocarriles quedara virtualmente suspendida. El cambio estaba motivado especialmente por la convic­ción de Prieto de que en el futuro los camiones proporcionarían un trans­porte más eficaz y económico; pero esta nueva tendencia tuvo también gran­des implicaciones políticas. Muchos industriales vascos se inclinaban por la República por la promesa de ésta de conceder estatutos de autonomía.

     »Prieto, aunque nacido en Oviedo, había vivido casi toda su vida en Bilbao, donde era propietario del influyente diario El Liberal, y contaba con la co­operación de la clase media catalana y vasca para desarrollar la economía de la España republicana. No hace falta decir que los industriales vascos echaron la culpa a la República por la crisis de la industria metalúrgica, cuan­do fueron cortados drásticamente los pedidos de equipo para los ferrocarriles. Sus esperanzas de obtener el Estatuto los mantenía en el campo repu­blicano, pero sin gran entusiasmo.

»La República tuvo también dificultades con los ferroviarios, tradicionalmente organizados por la UGT, pero influidos ahora por la CNT [desempeñó un papel fundamental en la consolidación del anarquismo en España en el primer tercio del siglo XX]. Con el advenimiento de la República, esperaron grandes aumentos de salarios ade­más de la jornada de ocho horas, y en el verano de 1931 estaban preparados para ir a la huelga. Prieto, como ministro de Hacienda del Gobierno provi­sional, arriesgó su prestigio entre los trabajadores oponiéndose a las subidas de salarios. Haciendo números les demostró que los ferrocarriles habían estado funcionando con déficit desde hacía años, que la jornada de ocho horas aumentaría los costos, y que sería imposible financiar simultáneamen­te un aumento general de salarios aunque el Gobierno autorizara el aumento de las tarifas ferroviarias, una decisión que afectaría a los usuarios. Los ferroviarios se conformaron con la jornada de ocho horas y varias mejoras de sus condiciones de trabajo, pero desde entonces empezaron a creer que Prieto se había vendido a los capitalistas».

 

Es decir, que una política errónea como la del carbón de Asturias y la importaciones de trigo por malas previsiones, al mala gestión agraria del cítrico valenciano, y la caída del acero vasco, Casas Viejas (Cádiz), es el nombre con el que han pasado a la historia los episodios que tuvieron lugar entre el 10 al 12 de enero de 1933 que constituyen uno de los hechos más trágicos de la II República gobernando Azaña. "Acusado de complicidad en una represión desmedida con una orden de Azaña a los guardias: ni heridos, ni prisioneros, tiros a la barriga.  Acabó en huelgas y en unas elecciones generales que ganó la CEDA  [Confederación Española de Derechas Autónomas] en octubre del 34, de inmediata revolución de Asturias, auspiciada por los socialistas entre ellos Largo Caballero. Gana el Frente Popular de izquierda en febrero del 36 y liego guerra civil en julio. Estos son los años felices de la II República. No quiero una III ni soñando.

 

Publicado en AZperiodistas.com

martes, 13 de octubre de 2020

Los Reyes han presidido el Día de la Fiesta Nacional

 


Los Reyes han presidido el Día de la Fiesta Nacional

Ayer lunes 12 de octubre  se celebró en el Palacio Real de Madrid una atípica y descafeinada celebración del Día de la Fiesta Nacional, marcada por la pandemia y en un clima de tensión política que se ha reflejado en los abucheos al Gobierno proferidos por miles de ciudadanos que se han congregado frente al Palacio Real.

Este año con Madrid en estado de alarma la celebración del 12 de octubre ha quedado reducida a un austero acto militar en el Patio de la Armería, la misma ubicación donde se celebró el homenaje  de Estado a las víctimas de coronavirus el pasado mes de julio.

Gobierno veta la presencia de Felipe VI en Barcelona

 

Las noticias de estos días  me pillan los dedos contra la puerta, y es la de que el Rey Felipe VI no presidirá el acto de entrega de despachos a los nuevos jueces, que tendrá lugar este viernes 18 de septiembre en Barcelona, como viene siendo tradicional. La explicación que han dado es por motivos de seguridad. ¿Cómo?, no entiendo bien las causas y miro incrédulo en otros periódicos y leo en Libertad Digital que  dice: El Gobierno acumula gestos para amarrar el apoyo de sus socios de ERC a los Presupuestos Generales del Estado. Mientras se veta, por el gobierno la presencia del Rey  porque los actos del Rey serán refrendados por el Presidente del Gobierno y, en su caso, por los Ministros competentes (art. 64. 1. Constitución) en la entrega de despachos judiciales, como reclaman los independentistas para evitar su presencia, y, según el diario EL MUNDO, por recomendación del Ejecutivo, el ministro de Justicia, Juan Carlos Campo, ha hecho este miércoles un anuncio nada casual en el Congreso está tramitando los indultos a los encarcelados por sedición del “procés”, o más bien insultos al pueblo español.

 

Es inaudito y cobarde la decisión del Ejecutivo, sin duda alguna, se debe a la presión de los partidos independentistas catalanes, que le tienen cogida por la bragueta al gobierno de Sáncheztein, por no decir los cog... A este gobierno le debería dar vergüenza, alegar motivos de seguridad cuando se puede enviar 1.000 antidisturbios como si fuera un Barça - Madrid, pero no es el pueblo catalán a quien se teme, sino al oportunismo de los partidos políticos proindependentistas de Torra, Rufián, Borras, y compañía. Lo que sí pretende este gobierno socialista-comunista es restarle protagonismo a La Corona que con arreglo al artículo 1.3 de la Constitución, que dice: La forma política del Estado español es la Monarquía parlamentaria votado en 1978. Y cuando no se respeta la Constitución se está atentando contra todos los españoles, que es la única garantía jurídica que tenemos.

 

 Artículo 56  dice:

1.       El Rey es el Jefe del Estado, símbolo de su unidad y permanencia, arbitra y modera el funcionamiento regular de las instituciones, asume la más alta representación del Estado español en las relaciones internacionales, especialmente con las naciones de su comunidad histórica, y ejerce las funciones que le atribuyen expresamente la Constitución y las leyes.

 

El Rey, de ninguna manera, puede ser ninguneado, porque es garantía de unidad de España.  El rey Alfonso XIII se marchó, cuando desde los balcones de los ayuntamientos se  proclamó la ilegal al II República, no en un plebiscito sino en unas elecciones municipales, en asalto al poder, ante la cobardía de los monárquicos, y, para evitar una guerra civil  el Rey se marchó, y la guerra fue inevitable cinco años después. Porque lo primero que hizo la República  fue quemar en mayo de 1931 más de cien iglesias conventos en toda España,  y asesinaron a casi 5.000 sacerdotes y monjas, esto sí que es Memoria Histórica, para forzar al presidente Alcalá Zamora para aprobar la Constitución laica de la República, y conseguir la separación de poderes de Montesquieu.

 

Lo que pretenden los socialistas-comunistas es desarrollar, próximamente, un referéndum o plebiscito para la reforma el artículo 1.3  de la C. y caminar hacia la III República, siempre un camino incierto, imprevisible y peligrosísimo.

 

¿Pero en manos de quién estamos, quiénes nos administran?

 

¡Viva España y viva el Rey por muchos años!

 

Ramón Palmeral

lunes, 12 de octubre de 2020

La moción de censura de Vox se debatirá en el Congreso el 21 y 22 de octubre 2020

 

La moción de censura de Vox se debatirá en el Congreso el 21 y 22 de octubre

No tiene ninguna posibilidad de prosperar y es la quinta en Democracia. Solo salió adelante la de Sánchez contra Rajoy

Madrid Actualizado:
Noticias relacionadas

El Congreso de los Diputados debatirá la semana que viene la moción de censura registrada por Voxel pasado día 29 de septiembre, según informaron a Servimedia fuentes parlamentarias.

Esta moción de censura será la quinta que se plantea en periodo democrático y seguramente no saldrá adelante como tres de las anteriores -sólo triunfó la planteada por Pedro Sánchez en 2018 contra Mariano Rajoy-, al no contar con los apoyos suficientes.

Vox registró la moción de censura en la Cámara Baja el 29 se septiembre por la gestión del Gobierno ante la pandemia del coronavirus. La Mesa del Congreso tiene que ratificar la celebración de la moción de censura, cuyos debates comenzarían, según las fuentes consultadas, el día 21 y 22 de octubre.

Por parte de Vox protagonizará el debate, en primer lugar, su diputado por Barcelona y candidato a la Generalitat de Cataluña, Ignacio Garriga, quien compartirá tiempo con el líder de la formación, Santiago Abascal.

Sin límite de tiempo

Según el artículo 177 del Congreso, uno los representantes del grupo que propone la moción de censura -en este caso, Vox- abrirá el debate teniendo tiempo ilimitado para defender sus postulados. A continuación, tomará la palabra el candidato propuesto para la Presidencia del Gobierno ( al parecer, el propio Abascal), también sin límite de tiempo, con el fin de exponer su programa.

Tras la interrupción por la Presidencia del Congreso, podrá intervenir un miembro de cada uno de los grupos parlamentarios de la Cámara que lo solicite, por un tiempo de 30 minutos. Todos los intervinientes tienen derecho a un turno de réplica o rectificación de diez minutos.

La moción de censura será votada a la hora que establezca previamente la Presidencia del Congreso, no pudiendo ser anterior al transcurso de cinco días desde su presentación en el registro. La moción de censura necesita del voto de la mayoría absoluta del Congreso para ser aprobada.