Los alicantinos sufren uno de los tipos impositivos más elevados de España en los bienes de naturaleza urbana. Los principales consistorios han aprobado medidas para aumentar el coste de los recibos en el último lustro con el fin de poder cuadrar cuentas y mantener las instalaciones construidas durante la época de bonanza
20.05.2013 | 07:09 /Diario InformaciónDonde verdaderamente se observa la presión fiscal que aplican los ayuntamientos es en el tipo impositivo del impuesto. El gravamen oscila por ley entre el 0,40% y el 1,1%, aunque con salvedades. Por ejemplo, las poblaciones que sean capital de provincia, las localidades que dispongan de servicio de transporte público colectivo de superficie y los municipios que presten más servicios de los recogidos en la Ley reguladora de las bases del régimen local. Si cumplen algunos de estos requisitos, pueden ampliar el tipo de gravamen hasta un máximo de un 0,07% en los dos primeros casos, y un 0,06% en el tercero. Esta circunstancia se da, por ejemplo, en Elda. El Ayuntamiento capitaneado por Adela Pedrosa posee el tipo impositivo más elevado de toda la provincia para bienes de naturaleza urbana, con un 1,1820%, de acuerdo con los datos de la Dirección General del Catastro. Casi cuatro décimas más que la media del resto de poblaciones alicantinas, cifrada en un 0,7949%.