Supuesta corrupción en el PSOE: Pedro Sánchez pide perdón y anuncia una auditoría externa
El presidente del Gobierno y del PSOE, Pedro Sánchez, ha anunciado este jueves una auditoría externa de las cuentas del partido tras el escándalo del caso Santos Cerdán, implicado en presuntas tramas de corrupción. En una comparecencia desde la sede socialista de Ferraz, Sánchez ha pedido perdón a la ciudadanía y ha admitido: “No tendría que haber confiado nunca en él”, en referencia al ya exsecretario de Organización del PSOE. Aldama tenía razón. Regeneración por la democracia. La salida de Pedro está próxima. Cuando mas tiempo tarde, peor para él y para le partido.
Sánchez ha asegurado estar “indignado y triste” al ver cómo su “proyecto político se ve afectado por la conducta de unos pocos”. Visiblemente afectado en algunos momentos, el presidente ha recordado que hasta esta misma mañana seguía convencido de la integridad de Cerdán, a quien calificó recientemente de “persona honesta” en el Congreso.
Dimisión de Santos Cerdán y graves acusaciones de la Guardia Civil
La comparecencia de Sánchez se produjo minutos después de que Santos Cerdán presentara su dimisión como secretario de Organización del PSOE y renunciara a su acta como diputado. La decisión se ha visto forzada por un demoledor informe de la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil, que lo señala como gestor de comisiones ilegales en adjudicaciones públicas y como posible manipulador de las primarias del PSOE en 2014, que encumbraron a Sánchez como secretario general.
El informe apunta a que Cerdán colaboró con José Luis Ábalos y Koldo García en el presunto cobro de comisiones de hasta 620.000 euros, a cambio de adjudicaciones a constructoras. Además, incluye mensajes comprometedores de Cerdán a Koldo García en los que se sugiere que falseó votos durante las primarias socialistas: “Apuntas como que han votado esos dos que te faltan sin que te vea nadie y metes las dos papeletas”.
Aunque Cerdán insiste en su inocencia, la investigación también destaca la estrecha relación personal y política que mantenía desde 2013 con Koldo García, exasesor de Ábalos y otra figura clave en esta presunta trama de corrupción.
Repercusiones políticas: Sánchez se blinda, pero el PSOE se sacude
Pese a la gravedad del caso, Pedro Sánchez ha descartado una crisis de Gobierno. Ha recalcado que el escándalo afecta al partido, no al Ejecutivo, por lo que no prevé cambios en su equipo ministerial. No obstante, ha confirmado que sí habrá una profunda renovación de la ejecutiva del PSOE, que se abordará en el Comité Federal del 5 de julio en Sevilla.
Cabe recordar que hace solo medio año, el PSOE celebró su 41.º Congreso Federal también en Sevilla, en el que Sánchez optó por rodearse de su núcleo duro sin acometer la prometida remodelación. Ahora, presionado por una tormenta judicial cada vez más asfixiante, no podrá postergar más los cambios internos.
Un Gobierno sin Presupuestos ni margen político
La crisis interna del PSOE estalla en un momento de máxima fragilidad para el Gobierno, que sigue sin poder aprobar los Presupuestos Generales del Estado. Esta situación amenaza la estabilidad del Ejecutivo, que depende del apoyo parlamentario y de la credibilidad política que ahora se ve severamente comprometida.
Pese a ello, Sánchez ha reiterado su intención de agotar la legislatura hasta 2027 y ha descartado cualquier adelanto electoral. Sin embargo, la presión crece tanto dentro como fuera del partido, en un contexto donde la supuesta corrupción alcanza las raíces del liderazgo socialista.
Contexto político: congreso del PP en paralelo
El Partido Popular celebrará su congreso en Madrid en las mismas fechas en las que el PSOE intentará recomponerse en Sevilla. La coincidencia subraya la intensidad del momento político, con los principales partidos nacionales enfrentando escenarios muy distintos: mientras el PP busca consolidar su proyecto, el PSOE se enfrenta a una grave crisis de legitimidad.
