ARTICULOS DE OPINION


Revista digital de arte, cultura y opinión en Alicante. Enlace con POESIA PALMERIANA. En estas páginas no podemos estar ajenos a lo que pasa en España ni en el mundo. Dirigida por el escritor, poeta y pintor Ramón PALMERAL. Los lectores deciden si este blog es bueno, malo, o merece la pena leerlo. El periodismo consiste en decir lo que a algunos no les gustaría leer.

jueves, 5 de junio de 2014

El Rey: 'O abdicaba ahora o tenía que esperar dos años'

El Rey: 'O abdicaba ahora o tenía que esperar dos años'


«Esto ya era necesario». Es la afirmación prácticamente unánime de las personas que mantienen vínculos de amistad con el Rey Juan Carlos. Para ellas la abdicación del Monarca ha sido en el fondo una sorpresa muy relativa. Las que ha podido contactar EL MUNDO mantienen que el Rey, un hombre estrictamente celoso de la estabilidad de la institución que encarna, tenía esta opción presente, sobre la mesa, desde hace mucho tiempo, aunque fue en enero cuando realmente la tomó en consideración. «O ahora, o habrá que esperar dos años», fue su reflexión a la vista del complicado calendario político que se presenta hasta finales de 2015 y en el que él, en ningún caso, quería interferir.
Los problemas de salud que se manifestaron abiertamente tras el tropezón de Botsuana y llevaron a Don Juan Carlos a encadenar intervenciones y periodos de convalecencia, y la perspectiva de un largo periodo marcado por las citas electorales en el país, pusieron coto por delante y por detrás al momento concreto y más apropiado para dar paso al Heredero.
Al Rey «le hubiera gustado cumplir 40 años de reinado pero el calendario no lo permitía», explica uno de sus próximos, que llama la atención sobre el hecho de que ese aniversario se produciría el 22 de noviembre de 2015, coincidiendo casi milimétricamente -salvo adelanto sorpresa- con la celebración de las próximas elecciones generales.
Una de las obsesiones del Rey, según explican en su círculo más cercano, era dar los pasos más trascendentes -y lógicamente el de la abdicación lo era- en un buen momento físico -«al alza», decía-, no en plena convalecencia. Y desde abril de 2012, la vida del Monarca ha estado marcada por las entradas y salidas del hospital. El final del calvario físico sólo empezó a vislumbrarse en noviembre de 2013, cuando se le sustituyó la prótesis provisional de la cadera izquierda por una definitiva. Apenas mes y medio después, a principios del pasado enero, comunicaba al Príncipe de Asturias su intención de abdicar.
A partir de ahí, y mientras esperaba una mejoría clara, inició un particular «juego de los barquitos», como describe gráficamente un amigo. «Se trataba de buscar en la cuadrícula del calendario los huecos apropiados para acertar. Y había muy pocos».
Junto al deseo de aparecer físicamente bien, el Rey se había autoimpuesto otra condición imprescindible: «En ningún caso interferir en un proceso electoral o en un debate político de enjundia». Y echó cuentas.
Se descartaba la primavera por estar ocupada con la campaña y los comicios europeos; tras el verano se encendería el debate de Presupuestos, en esta ocasión con clara impronta electoral; a continuación llegarían las municipales y autonómicas de mayo de 2015 y, por último, las elecciones generales.
La única pista de aterrizaje que estaba despejada era muy corta: el mes de junio de 2014. Después tocaba atinar con la fecha: los malos resultados en las urnas de los dos grandes partidos y, sobre todo, la intención de Rubalcaba de abandonar la Secretaría General del PSOE fueron condicionantes de peso.
«El paso del Rey necesitaba del respaldo sólido de populares y socialistas; los primeros no ofrecían dudas y los segundos, con Rubalcaba al frente, tampoco», aseguran las fuentes consultadas, que dan por hecho que el líder del PSOE ha aplazado hasta mediados de julio su marcha definitiva para garantizar el apoyo de su partido al Monarca y a la estabilidad institucional.


.................


«Normalidad en la sucesión»

«Su Majestad el Rey Don Juan Carlos acaba de comunicarme su voluntad de renunciar al trono y abrir el proceso sucesorio -comenzó Rajoy, sin rodeos-. Los motivos que han llevado al Rey a tomar esta decisión es algo que Su Majestad desea comunicar personalmente a todos los españoles a lo largo de esta misma mañana».

miércoles, 4 de junio de 2014

CIU se asbtendrá en la votación de la abdicación de Juan Carlos I. Divide y vencerás

    El Gobierno se ha instalado en una profunda preocupación, indignación y alerta máxima por la posición de CiU (Convergencia y Union), que ha decidido abstenerse en la votación clave, la de la ley de la abdicación de Don Juan Carlos. El presidente, Mariano Rajoy, ha lanzado un mensaje muy duro contra esa decisión, que al Ejecutivo le ha sorprendido porque CiU es uno de los firmantes clave del pacto constitucional de 1978, siempre ha defendido la monarquía y además de las conversaciones con Josep Antoni Duran el Gobierno dedujo que el sí era seguro. "Este es un momento muy importante en la vida de la nación española", ha arrancado Rajoy, con el portugués Pedro Passos Coelho a su lado, para dar la mayor relevancia a la decisión de CiU.
     El presidente ha trasladado casi una idea de traición y ha desmentido la versión de CiU de que se han quedado fuera de las negociaciones. "El Gobierno ha actuado con transparencia y lealtad, informando a todos los grupos políticos. Nadie ha sido ignorado o preterido. Todo el mundo puede tomar su decisión que estime conveniente en base a su historia, a su libertad, a sus propios intereses. Lo único que me gustaría a mí es que en una ocasión como esta no hiciésemos política pequeña". El mensaje a CiU era muy evidente y muy duro.

   Ahora no encontramos con la dicotomia de Duran y Lleida, lider de Unión y asociado en la elecciones con Convergencia, que no sabe qué hacer en esto de la Ley organica de la abdicación del Rey Juan Carlos I, no sabe si va a decir sí, el no o se va a abstener. Esto es propio de un político bisiagra que no tiene las ideas claras sino que va con los tiempos. Artus mas e ha dicho que se abstegna porque ERC se klo ha pedido y le puede amargar la alianza de gobierno en la Generalitad.
Ahora tenemos a una Cataluña dividida, Un los que quieren la consulta de indeoendencia y la otra cataluña que no quiere o tiene otras ideas de España. Esto es lo bueneo y real, dividirlos y con ello enfrentarlos y por supuesto reducurlos en la demoracia. Divide y vencerás.

La historia se repite. "Can vies", anarquismo, insurrección y sabotajes. Barcelona

La elecciones europeas le dan mayoría a Ezquerra Republicana de Cataluña 25 de mayo 2014.

La Historia:
El 19 de diciembre de 1932, Lluís Companys, líder de Esquerra Republicana, fue elegido primer presidente del Parlamento de Cataluña. La política de orden público de Esquerra Republicana produjo los "escamots", especie de organización compuesta de grupos de asalto, de fisionomía totalitaria, que pusieron en práctica toda una acción terrorista de intimidaciones, secuestros y apaleamientos. El nacionalismo exacerbado del nuevo gobierno catalán no toleraba la coexistencia de dos poderes: el de Esquerra Republicana y el de la CNT. La Esquerra surpimió constantemente la prensa confederal, clausuró sus centros y ejerció la intimidación sobre sus militantes.
El 8 de enero de 1933 estalló una insurrección huelguista de tres semanas de duración en todo el país. La CNT pretendió enmascarar el estallido bajo el camuflaje de una huelga ferroviaria, pero el intento era fútil puesto que la propia organización no se recató en su propaganda revolucionaria de manera que, como afirmó J. Peirats:
"...la fuerza pública, los flamantes guardias de asalto y la veterana guardia civil, estaban preparados para toda eventualidad, La revolución les había sido telefoneada. Pero la fidelidad a la palabra empeñada, en materia revolucinaria, ha sido siempre una especie de pundonor confederal de discutibles resultados."
De manera que, contra todo evento, la insurreción se lanzó a la calle, pese a que, la huelga ferorviaria fracasó de inmediato por la adhesión del Sindicato Nacional de Ramo de la UGT a la postura oficial. Y, en fin, ocurrió que tampoco esta vez se daba la adhesión de las tropas al movimiento revolucionario. El pueblo tampoco lo secundó, inicerto y medroso.

En el año y medio de vigencia de la II República, se habían producido 30 huelgas generales, 3.600 huelgas parciales y 161 suspensiones de periódicos. Y como consecuencia, 400 muertos, 9.000 detenciones y 160 deportaciones. Una de las huelgas más memorables fue la de Duro Felguera, que ya había comenzado en julio de 1931 y se sostuvo nueve meses contra la empresa por haber despedido a trabajadores de edad avanzada sin indemnización. La huelga se sostuvo por solidaridad y fue mantenida por casi toda la población, diputándose familias cenetistas de todo España los hijos y familiares de los huelguistas.
Fue por este año también cuando se constituyó, en Madrid, la Federación Ibérica de Juventudes Libertarias (FIJL). Se manifestaba adversa a la propiedad individual, al principio de autoridad, con sus derivaciones de la política y el estado, y a la religión. Las juventudes libertarias eran concebidas como vivero de futuros valores del anarquismo, y en efecto, individuos muy notables surgieron de esta entidad desde 1932. La FIJL, junto a la FAI y la CNT -y posteriormente la organización Mujeres Libres- constituyeron lo que se conococería como el Movimiento Libertario.

............Actualidad................
Los gobiernos democráticos deben tener mucho cuidado con no soliviantar a la población con injusticias, malos ejemplos, paro y dándoles de lado. Porque el anarquismo nunca fue bueno, y esto es lo que pasa cuando no se gobierna paa el pueblo. Y es que no aprenden.

Comentario a la Ley de Defensa de la República por César Vidal.

LA PRIMERA Y LETAL MEDIDA DEL BIENIO AZAÑISTA

La Ley de Defensa de la República /Libertaddigital.

Cuanto más estudio la II República, más tenebrosa me parece. El periodo en el que vamos a detenernos hoy es uno de los más incensados: se dice de él que fue una muestra de lo que pudo ser la República. Ciertamente, fue lo que la República quiso ser; y es para echarse a temblar.
Hablamos del denominado bienio azañista, también conocido como bienio republicano-socialista, que, si se le quiere dar una fecha de inicio, arranca el 14 de octubre de 1931, cuando Alcalá-Zamora, escandalizado por el carácter anticlerical de la Constitución, decide dimitir como presidente del Consejo de Ministros (pero, eso sí, para convertirse en presidente de la República, que no está mal...). Le sustituye Azaña, que se va a convertir en el hombre fuerte del nuevo régimen y que en esos dos años va a llevar a cabo una serie de reformas que la versión oficial, la leyenda rosa de la República, va a presentar como las que necesitaba España; las grandes reformas que tenían que acabar con la injusticia social, con los problemas del Ejército, con el peso que ejercían determinadas ideologías, y abrir el camino a la democracia social.

He de decir que eso es una mentira absoluta. En realidad, las reformas de esos dos años, en términos generales muy chapuceras, lo que persiguen, fundamentalmente, es una sola cosa: mantener en el poder a la izquierda y al nacionalismo catalán por los siglos de los siglos.

Son cinco las reformas que articuló Azaña, por las cuales se le ha alabado durante décadas: una tenía por objeto controlar a la oposición mediante la erradicación de la libertad de prensa, lo cual tiene paralelos innegables y nos suena...; otra, la expulsión de la Iglesia Católica de la vida pública, porque se trataba de un referente ideológico con el que el alcalaíno no quería competir; la tercera, el dominio ideológico del Ejército y de la enseñanza, que suena tremendo; la cuarta, contentar al nacionalismo catalán, y la quinta, crear una nueva clase que se sintiera beneficiada por la República y que la respaldase completamente: no es otra cosa lo que pretende la reforma agraria, como reconoció el propio Azaña: quería crear una nueva clase de propietarios como la que surgió en Francia a raíz de la Revolución.

Hoy nos detendremos en la primera medida que toma el Gobierno azañista, la Ley de Defensa de la República, que data del 20 de octubre; es decir, que no hacía ni un semana de la salida de Alcalá-Zamora del Consejo de Ministros.

¿Qué era la LDR, de la que no se suele hacer mención en los manuales y en los libros de determinados hispanistas, esa plaga que ya denunció Larra en su día? Pues un instrumento muy sencillo, de cuatro artículos, pensado para acabar totalmente con la posibilidad de hacer oposición al Gobierno de la República. Entre lo que la LDR consideraba una "agresión" al régimen se contaba el "difundir noticias que pu[dieran] quebrantar el crédito del Gobierno", así como "toda acción o expresión que redund[ase] en menosprecio de las instituciones y organismos del Estado" o la apología del régimen monárquico. También podían ser considerados culpables de lo mismo quienes suspendieran o pusieran fin a una actividad industrial, así como quienes alteraran injustificadamente el precio de las cosas (pero, claro, ¿qué era una alteración injustificada?). Igualmente, era punible la falta de celo y la negligencia de los funcionarios públicos.

A la hora de emplear la LDR se aplicó la ley del embudo. Un ejemplo: según la norma, era una agresión a la República la comisión de actos violentos por motivos religiosos; pero esto no se tuvo en cuenta cuando la violencia iba dirigida contra propiedades, personas o signos religiosos, sino cuando las personas religiosas que habían sido atacadas devolvían el golpe.

¿Qué castigos contemplaba la LDR? Bueno, pues según su artículo segundo, y esto es verdaderamente escalofriante, los reos de agresión a la República podían ser "confinados o extrañados por un periodo no superior al de vigencia de la ley"; es decir, que en teoría podían ser condenados por los siglos de los siglos...

La LDR permitía al Ministerio de la Gobernación, sin intervención de juez alguno, suspender las reuniones o manifestaciones públicas de carácter político, religioso o social si pensaba que aquello podía perturbar la paz, así como clausurar centros o locales de asociaciones de todo tipo.

Esta fue, repito, la primera ley aprobada por Azaña. Una ley que buscaba triturar a la oposición, acabar con la libertad de prensa y violentar todos los principios del Derecho Penal.


Pinche aquí para escuchar la versión radiada de este capítulo de la BREVE HISTORIA DE ESPAÑA PARA INMIGRANTES, NUEVOS ESPAÑOLES Y VÍCTIMAS DE LA LOGSE.

"Demasiado tarde" por José Luis Manzanarez

El clavo

Demasiado tarde /Publicado en  La República de la ideas.

José Luis Manzanares
En un artículo publicado en este mismo diario el 25 de septiembre de 2013 se decía literalmente:
“La Constitución de 1978 reintrodujo en España la Monarquía Parlamentaria, dificultó extraordinariamente los cambios en esa materia y se ocupó del Rey, de sus competencias, del refrendo de sus actos y de la inviolabilidad e irresponsabilidad de su persona. La abdicación apenas quedó apuntada, y de las abdicaciones y renuncias se ocuparía una Ley Orgánica que nunca llegó siquiera a entrar en el telar. Nadie sabe hoy con certeza hasta dónde llegan aquella inviolabilidad e irresponsabilidad personales, pero sí que, sea cual fuere su alcance, la Constitución sólo se refiere al Rey en presente.
A falta de una Ley Orgánica que extienda ambos privilegios a quien fue Rey pero dejó de serlo por abdicación, la polémica estaría servida en perjuicio de la propia Corona y de la deseable seguridad jurídica. Nunca entenderé –o quizás me resista a entender- la airada reacción de algunos destacados monárquicos ante la sola mención de tamaña gotera en el salón principal, o sea, en el Salón del Trono, de la Casa Real. Lo lógico sería dar las gracias por la advertencia, lamentar no haberse dado cuenta hasta ahora y ponerle remedio. A partir de ahí, cabría prolongar automáticamente ambos privilegios, someterlos a alguna condición temporal o incluso rechazarlos de plano. Aquí no se defiende una respuesta determinada. Sólo se denuncia la existencia de un punto muy débil en la arquitectura de la Corona”.
Y unos días después, el 2 de octubre, se insistía en las imprevisiones constitucionales y legales en relación con la salud y una posible abdicación del Rey:
“La salud del Rey de España tiene, sin embargo, una faceta institucional que no ha recibido la debida atención por la desidia de nuestros Poderes Legislativo y Ejecutivo desde que se promulgó la Constitución hasta hoy, treinta y cinco años más o menos.
Una vez asentada la Monarquía en la Constitución de 1978, y reducida la alternativa republicana a poco más que una entelequia, dadas las muchas dificultades con que tropezaría la reforma de la Carta Magna en esa dirección, el legislador español optó por el descanso indefinido.
Según el art. 56.3 de la Constitución, la persona del Rey es inviolable y no está sujeta a responsabilidad, pero nada se nos dice sobre lo que ocurriría si esa persona abdicase y, consecuentemente, dejase de ser Rey. Más aún, ni siquiera está claro el alcance de aquellos privilegios, pues tanto pueden limitarse a la jurisdicción penal y a la administración sancionadora como extenderse –en opinión rechazada por muchos juristas, entre los que me encuentro- al ámbito civil, incluidas las relaciones familiares”.
Hoy, finalmente, tenemos que hacer deprisa y corriendo lo que no hicimos durante tantísimos años, quizás por creer que así nos ahorrábamos los problemas. Pero nos equivocamos al esperar hasta que se han producido los hechos para ocuparnos de su regulación. Tras su abdicación, conviene repetirlo, el Rey no sólo pierde sus privilegios como tal sino, que no disfruta siquiera de aforamiento alguno. Ya veremos si la Ley Orgánica que ahora se prepara con toda urgencia resuelve, en lo posible, tan espinosas cuestiones.

El final del Juancarlismo

OPINIÓN /La República de las ideas

El final del Juancarlismo

José Oneto
Dentro de quince días, el 18 de este mes de junio, será proclamado Rey el príncipe Felipe de Borbón y Grecia, con el nombre de Felipe VI, en la operación política más rápida que se conoce en los últimos años. Una operación en la que ha predominado el sentido de la eficacia y la rapidez, frente a la solemnidad y al esplendor que supone, en las actuales circunstancias políticas y económicas, el acceso al Trono de un nuevo Rey y el final de toda una época y, cómo no, del Juancarlismo.
Desde la austeridad del contenido de la Ley Orgánica que ya ha sido enviada al Congreso de los Diputados que costa de un artículo único con un total de 48 palabras, incluidas las que establecen en la disposición final única, su entrada en vigor, hasta la misma exposición final de la Ley que, sorprendentemente se limita a recoger el texto del discurso con el que el Rey anunció que abdicaba, hasta el hecho mismo de los debates que se anuncian donde no habrá oportunidad de entrar en esa polémica política que se ha abierto en la calle sobre Monarquía y República, pasando por la aceleración de los trámites por los que tiene que pasar la Ley en el Congreso y en el Senado.
Viendo la Ley no se entiende esa nota oficial de que el jefe de la Casa Real Rafael Spottorno y la vicepresidenta del Gobierno Soraya Sáenz de Santamaria han estado negociando el texto de una Ley Orgánica de un solo artículo y discurso oficial incluido, en la que no se establece el nuevo status de Don Juan Carlos cuando deje de ser Rey, momento en que perderá la inviolabilidad que pasará al nuevo Rey, tema delicado que no ha querido ser abordado en las actuales circunstancias, probablemente por no encontrar el suficiente consenso ni en el Parlamento ni en la calle, que ha abierto un claro debate sobre la necesidad de un Referéndum sobre Monarquía y Republica.
Ya estaba decidido en la nueva Ley Orgánica del Poder judicial que tanto la Reina (en este caso Letizia), como los Príncipes de Asturias serían aforados lo que significa que solo podrán ser juzgados por el Tribunal Supremo, igual que ministros, diputados senadores y parlamentarios autonómicos. No es el caso del Rey padre que dependerá en cuanto a funciones a lo que decida su hijo como Jefe de la Casa Real. Simultáneamente tanto las infantas Cristina (a punto de ser imputada por el caso Nóos) y Elena, como los hermanas de don Juan Carlos dejaran de ser “Familia Real” para ser “familia del Rey”. Forman parte de la Familia Real los padres del futuro rey Felipe VI, los nuevos monarcas y sus hijas Leonor y Sofía.
La rapidez con la que viene actuando el Gobierno, no ha dado tiempo todavía para digerir la noticia de la abdicación, algo que ha sido guardado por algo más de una docena de personas en un estricto secreto, a pesar de que fue lo que provocó el que el líder de la oposición Pérez Rubalcaba, una vez convocado el Congreso extraordinario del PSOE, tras la debacle electoral del 25 de mayo, y su anuncio de tirar la toalla, siguiese al frente del grupo parlamentario para garantizar la votación de la Ley Orgánica de la Abdicación, que ha comenzado este mismo martes a tramitarse en el Congreso de los Diputados, para pasar, después del 11 de Junio al Senado.
Si en el país la noticia fue recibida por sorpresa, no menos sorpresa manifiesta la totalidad de la prensa mundial que recoge con amplitud análisis, crónicas e, incluso editoriales, en torno a lo que se presenta como un auténtico acontecimiento político que cierra toda una época en España en unos momentos en que el país sigue sumido en una gran crisis económica, de la que intenta recuperarse, con un problema de corrupción importante dentro de la clase política y con un desgaste de las instituciones que hicieron posible esa transición modélica, que impulsó el Rey con el apoyo del pueblo español.
La mayoría de los medios destacan las luces y las sombras de la crisis por la que atraviesa la Monarquía y el propio Rey (llevaba una vida de lujo, pidió perdón a la nación, pero no logró salvar la Corona, llega a decir algún periódico) pero hay que decir que, la mayoría, reconoce el papel fundamental que ha desempeñado en la normalización política del país, en la recuperación de las libertades y en la incorporación de España, después del franquismo, al club de los países más modernos de Europa. Un Rey que según el Frankfurter Allgemeine Zeitung ha sido, quizás, el ultimo monarca realmente político en Europa “debido a la historia de su país que únicamente de forma tardía logró liberarse de una dictadura que duró casi cuatro décadas”. Un país, además, donde han predominado más los “juancarlistas” que los monárquicos… Quizás por eso The Economnist habla, por cierto, del fin del Juancarlismo.

A Rubalcaba se le sublevan las bases


El Manantial /tomado del diario "La República de las ideas"

A Rubalcaba se le sublevan las bases

Pablo Sebastián
Rubalcaba no se va por nada del mundo. El aún secretario general del PSOE, que acaba de perder las elecciones europeas de manera estrepitosa -tras haber perdido las generales, vascas, andaluzas y catalanas-, sigue al mando disfrazado de ‘estadista’ y no deja de manipular el partido para controlar el congreso extraordinario que debería organizar una ‘comisión gestora’, como ocurrió cuando Joaquín Almunia dimitió tras su derrota electoral. Pero el eterno dirigente socialista sigue maniobrando en la oscuridad y después de cargarse las ‘primarias’ ya previstas, y de anunciar que dejará votar a los militantes del PSOE para elegir el nuevo líder, ahora ha rectificado y ha abierto el techo de los avales para que su candidata, Susana Díaz, acapare la inmensa mayoría con apoyo del aparato del partido, dejando unos restos para que no puedan competir más de uno o dos candidatos.
Y vamos a ver qué dice sobre semejante abuso Eduardo Madina, que va de demócrata, sobre este golpe de mano de Rubalcaba y sobre la otra cuestión que está inundando el debate precongresual de los socialistas: el referéndum sobre Monarquía y República. El que han rechazado públicamente Rubalcaba, González y Zapatero en defensa del consenso constitucional de 1978, y el que ahora se ha convertido en caballo de batalla de IU y Podemos, haciendo un daño incalculable a las bases electorales del PSOE, y a una parte del propio Partido Socialista, incluidas sus Juventudes y algunos dirigentes y direcciones regionales, por lo que vamos a ver cómo se desarrolla y acaba la crisis del PSOE.
La marcha del Rey Juan Carlos y la llegada -en quince días- del nuevo Rey Felipe VI ha abierto un intenso debate en la izquierda de este país donde se reclama el referéndum sobre la Monarquía que rechazan PP y PSOE, con el argumento de que para ello hay que provocar un cambio constitucional, lo que no es cierto dado que el referéndum lo puede convocar el gobierno y la reforma de la Constitución solo sería necesaria en caso de ganar la República.
Además, los defensores del referéndum, que no van a parar en sus movilizaciones, argumentan que la actual mayoría política que se sienta en las Cortes ha sido desautorizada por las urnas del 25-M y no es representativa. Pero sobre todo, lo que se está fraguando y algunos no ven es una movilización social y nacional en torno a una propuesta concreta, del referéndum republicano, que a buen seguro no dañará en principio las posiciones del PP -por más que perdieron ¡6.800.000 votos! con respecto a los comicios generales de 2011-, pero que puede provocar una ruptura del PSOE, donde muchos de sus militantes y de votantes ya se han pasado a IU y Podemos, y otros más lo pueden hacer en las próximas semanas.
A la vista de todo esto da la impresión de que solo el Rey Juan Carlos I, con su marcha, ha sabido valorar el cambio que se está produciendo en este país y ha abierto un tiempo de renovación generacional en la Corona, mientras que los líderes políticos, que se resisten a marcharse, no saben qué hacer, se atrincheran en aras de un presunto interés general e intentan maniobrar de espaldas a sus partidos y electores, como lo hace Rubalcaba, lo que acabará bastante mal.
El PSOE no solo tiene que dar opción a los militantes para que elijan directamente a su secretario general sino que debe permitir que todos los candidatos posibles opten al cargo y presenten sus programas. Y si de lo que se trata es simplemente de hacer una pantomima para colocar a Susana Díaz, medio abandonando la presidencia de la Junta de Andalucía, se van a equivocar. Porque lo que ganen en control del partido lo perderán en militantes y en votantes y eso puede convertir el PSOE en partido minoritario. De hecho la diferencia que ahora separa al PSOE de IU y Podemos, si ambos fueran en coalición y vistos los resultados europeos, es solo de 600.000 votos. De manera que cuidado con los juegos de manos de Rubalcaba porque esta vez, como las elecciones del 25-M, le pueden salir muy mal. En cuanto a González y Zapatero si tienen todo tan claro que se vuelvan a presentar.

Se ven manisfestaciones pidiendo una república presidencialista.

Algunos republicanos con gran alborozo reclaman una republica presidencialista. La republica presidencialista es la que convergen en la misma persona el Jefe del Estado y el Presidente del Gobierno, caso del Presidente de la republica de los Estados Unidos (Obama). Estos presidentes son elegidos por votación directa de los votantes por ello se pasan un año de elecciones. El presidente de los EE.UU. tiene que dar cuanta al Congreso. Tienen una constitución de 1787.
En España la forma de gobierno es diferente por la Constitución de 1978, donde el Jefe del Estado es una persona (El Rey que depende el Parlamento o Cortes) y el Jefe del Gobierno es otra. En las elecciones legislativas se vota a un partido político y se forman las Corte Generales (Congreso), que eligen al Presidente de Gobierno, que da cuenta de sus actos a la Cortes que representan a los votantes. Por eso no votamos presidentes sino partidos.
La formula parlamentaria, es mejor que presidencialista, es decir, las Costes tienen mucho poder. En cambio, en los EE.UU., todo el poder lo tiene el presidente por ellos hacen guerras, espían, y los que le da la gana. Es un modelo antiguo de 1787.
Para cambiar la Constitución en un referéndum según el art, 168, hace falta que dos tercios de los diputados fueran republicanos. Hoy por hoy solo hay 25 diputados de estas ideas que me parecen aceptables y democráticas como otra cualquiera.
Las funciones de un rey parlamentario (Inglaterra, Bélgica, Holanda) son muy militadas, a lo mejor la gente piensa que se trata de un rey absolutista, cuando no es así.

Puerta del Sol.

martes, 3 de junio de 2014

La torpezas del Rey y manifestaciones de la bandera tricolor.

Muchas han sido la torpezas del Rey (propias de un rey Borbón del XIX) en los últimos años, desde la herencia de su padre en bancos suizos, los negocios del yerno y la imputación de la Infanta Cristina, la amiga Corina, la cacería de elefantes en Botsuana, el distanciamiento con la Reina; a esto se le ha unido la fatiga de su mermada salud.
Sin embargo, hemos de reconocer que ha sido el mejor embajador de España, desde aquel "por qué no te callas" a Chaves que tanto nos enorgulleció. Hemos de reconocer todos los servicios que ha hecho a la democracia desde el 23 F, su amistad con los países árabes, y la estrecha amistad con nuestro vecino Marruecos. Y tenemos la suerte de que su heredero Felipe VI ni es cazador ni es mujeriego.
Por otra parte, es normal que en una Españal plural y democrática los partido de tración republicana se manifiesten pidiendo la III República. Y no pasa nada. Para cambiar la forma política del Estado habría que reformar el art. 1.3 de la Constitucion del 78 que dice que España es una Monarquía parlamentaria, lo que quiere decir que el poder no reside en el Rey sino en el Parlamento o Corte Generales. Por ello pido tranquilidad para aquellos ciudadanos de cierta edad que siguen asustándose cuando ven una bandera tricolor. La llamada segunda transición hacia una III República no se va a hacer.

El Rey Juan Carlos I, y los alicantinos

Siempre al lado de los alicantinos

Los Reyes hicieron su primer viaje oficial en 1976, recalando en Alicante, Alcoy, Elche, Elda, Petrer y Dénia.

03.06.2014 | 09:04
Don Juan Carlos comprueba el tacto de una de las piezas fabricadas en Alfombras Imperial de Crevillent durante su visita a la provincia como príncipe.
Don Juan Carlos comprueba el tacto de una de las piezas fabricadas en Alfombras Imperial de Crevillent durante su visita a la provincia como príncipe.
La familia real ha sido partícipe de los acontecimientos más destacados y quiso estar al lado de los damnificados en las inundaciones de 1997. Don Juan Carlos navegó en diversas ocasiones por aguas alicantinas, como el príncipe Felipe, quien en una entrevista con INFORMACIÓN dijo que su padre era mucho mejor regatista. La Policía Local de Alicante paró en 1988 al heredero por exceso de velocidad
Durante sus casi cuatro décadas como monarca, el Rey ha visitado la provincia en innumerables ocasiones, desde su primer viaje oficial
con la Reina en 1976 cuando la recorrió de norte a sur, a inauguraciones, maniobras militares, regatas, actos deportivos como una final de la Copa del Rey o para dar su apoyo a los alicantinos en momentos críticos como la riada de 1997. También el resto de la familia real conoce bien la tierra alicantina.
La primera visita oficial de don Juan Carlos a la provincia fue en 1965, aún como príncipe. Estuvo dos días motivado por su interés por las economía y la industria alicantinas. Pasó por diversas empresas de Alcoy, como Papeleras Reunidas, Manufacturas Carbonell o la Mistera; así como por Alfombras Imperial de Crevillent; Aluminio Ibérico de Alicante; la fábrica de la seda de Orihuela y en Elche se reunió con empresarios.

Leer más en diario Información

lunes, 2 de junio de 2014

¿Monarquía o III República?

   Las redes sociales y los partidarios de la III Repúblican están que arden. Esta tarde hay manifestaciones para pedir un referéndum para poder elegir entre Monarquía o República. Estos movimientos son la herencia de los 15-M, Izquierda Unida, Pomeos, la victoria en la europeas de los partidos minoritarios, la cegara de la Corona ante los casos de corrupción, el yerno y la Infanta, los intelectuales cabreados y los descendientes de la II República etc. etc.
   Creo que este referéndum no es lo que más le conviene a España. Sin embargo, poniendo la mano en el coración creo que un presidende de la república no le llegaría al Principe Felipe ni a la suela de los zapatos, su preparación, su prestigio internacional con Iberoamérica, países árabes y Marruecos son incuestionable. Por despecho, por protagonismo de unos cuantos líderes no se puede acabar con la Corona Constitucional. Creo que no es el momento.
   Aceptar el referéndum sería incómodo para el PSOE, que históricamente ha apostado por el modelo de gobinero de la república.
    Los presidentes de repúbicas electos en elecciones tampoco brillan por su rectitud y limpieza.
 

Juan Luis Cebrián, ha escrito en El País, 2 de junio 2014
   La sucesión en el trono se va a producir en momentos especialmente delicados de la vida española, acosados los ciudadanos por la crisis económica, desorientada la clase política, huérfano el país de los liderazgos necesarios, e inmerso en una confusión que amenaza tanto la cohesión territorial como la social. De forma que la utilidad de la institución monárquica sigue siendo un buen parámetro a la hora de apoyar esta nueva verdadera transición que constituye la asunción del trono por el Príncipe de Asturias. No nos encontramos sólo ante un relevo generacional, sino ante un cambio de época en el que nuevamente la institución puede y debe servir de ayuda a la hora de solventar los serios problemas que enfrentamos. Sin duda el más evidente desde el punto de vista estructural es la desafección creciente hacia el Estado que se percibe en Cataluña. La exasperante pasividad del Gobierno a este respecto no ha hecho sino empeorar las cosas. Por eso, si ya parecía evidente que era precisa una reforma constitucional que garantizara la continuidad del sistema emanado de la Transición, el paso dado este mismo lunes por el Rey la justifica aún más.  (La utilidad del Rey)

..................
En unas lecciones por la Jefatura del Estado a quién prefieres a Felipe VI, a Felipe González, a Aznar, a Zapatero, a Cayo Lara, a Carmen Chacón o al de la coleta.

Abdicación del Rey Juan Carlos I en favor de su hijo del Príncipe de Asturias.



Comparecencai del Presidente el Gobierno de España. 10´45 ho
ras, del 02 de junio 2014

El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, ha anunciado este lunes, en una declaración institucional sorpresa, la abdicación de Juan Carlos I. Consulte aquí la declaración en directo.
Rajoy ha comenzado su discurso anunciando la decisión del monarca así como ha transmitido el mensaje que el Rey le ha dado para los españoles: "El Rey está convencido de que este es el mejor momento para el cambio de la jefatura del Estado".
Durante la comparecencia, el presidente del Gobierno ha ponderado la preparación del Príncipe de Asturias, y ha asegurado que espera que la sucesión tenga lugar en breve, una vez aprobado en las Cortes.
................





................................. ¿Dónde estaba Palmeral cuando se enteró de la noticia?................

Venía yo en el coche escuchando la radio, sintonizado Radio Nacional de España por la Avenida Aguilera (Alicante), dirección Juzgados de Benalúaa para enmarcar un cuadro, cuando me enteré de la notica de la abdicación del Rey en palabras de Mariano Rajoy. Supongo que el Rey a elegido este momento en que los partidos mayoritarios están de capa caída y el PSOE está en la UCI. Además el Rey con sus operaciones está tocado, y no debe encontrarse muy bien. Yo le comprendo prefectamente.
Por otro lado presiento que van a imputar a la Infanta doña Cristina por el caso Noos, por culpa de este exbalonmanista. malabarista del cheque, como Urdangarín está haciendo más por la  III República que los propios republicanos.
Supongo que el Principe Felipe reinará con el nombre de Felipe VI.
La Sucesión de la Corona está recogida en el art, 57 de la Constitución de 1978.


¿Monarquía o III República?
Los partidos como IU, Podemos, Bilbu o Ezquerra piden referédum para un cambio de la monarquía a la república. Quizás es el momento.

Creo sinceramente que no hay nadie  mejor que el Rey y el Principe Felipe para las relaciones internacionales. En Iberoamerica lo respetan mucho. Los paíse arabes lo consideran hermano y pariente. 39 años de reinado han sido muy eficaces. No estoy de acuerdo en lo de una III República. Pues no tenemos a nadie de su categoria y popularidad. Otro asunto distinto ha sido su baja popularidad en lo últimos años por culpa de sus errores.
Las redes sociales y los partidarios de la III Repúblican están que arden. Esta tarde hay manifestaciones para pedir un referéndum para poder elegir entre Monarquía o República. Estos movimientos son la herencia de los 15-M, Izquierda Unida, la victoria en la europeas de los partidos minoritarios, la cegara de la Corona ante los casos de corrupción, el yerno y la Infanta, los intelectuales cabreados y los descendientes de la II República etc. etc.
 Creo que este referéndum no es lo que más le conviene a España. Sin embargo, poniendo la mano en el coración creo que un presidende de la república no le llegaría al Principe Felipe ni a la suela de los zapatos, su preparación, su prestigio internacional con Iberoamérica, países árabes y Marruecos son incuestionable. Por despecho, por protagonismo de unos cuantos líderes no se puede acabar con la Corona Constitucional.
 Históricamente para el PSOE el modelo de la Jefatura del Estado es la República.


Claves de nterés Europa e Hispanoamérica:
Europa, México, Argentina, Colombia, Ecuador, Perú, Bolivia, Uruguay, Paraguay, El Salvador, Costa Rica, Honduras, Nicaragua, Islas del Caribe, Cuba, Caribe, Venezuela, Filipinas, Guinea Ecuatorial.

domingo, 1 de junio de 2014

La aburrida plaza de la Viña. Todos tienen buenos coches menos yo. Coches deportivos.






La plaza de la Viña (Alicante-Babel), es un desastre no hay donde aparcar los Ferraris, los Porches, ni los Mercedes descapotables. Es que siempre la misma gente, las mismas caras, un verdadero aburrimiento. ¿Conocéis de algún sitio un poco más tranquilo?

Artesanía Amb Fusta. Aitor Vañó Calatayud. Agres (Alicante)


Taller de artesanía en maderas de distintas noblezas. Talla escudos heráldicos a buen precio.
Aitro Vañó 96 55 00 66- 696 547 006
email: aitoragres@hormail.com

sábado, 31 de mayo de 2014

La decepción son errores en la esperanza. Falsas esperanzas. Pero no hay que sucumbir.

Un ejemplo es cuando nos presentamos a un premio y no lo ganamos, entonces nos sentimos decepcionados, porque pesamos en el error de creer ser digno ganador de él. No viviamos en la realidad. Por ello hay que actuar siempre sin esperar grande resultados.

......................Articulo de Roberto Crobu, entrenador de ejecutivo..................
 Es muy frecuente usar el verbo “Decepcionar” de manera pasiva, asociada al comportamiento o acción de alguien.
   De hecho, es mucho más frecuente oir la frase “Me ha decepcionado” antes que “Estoy decepcionado”. Incluso cuando se usa esta segunda modalidadla manera de hablar se refiere en la mayoría de las circunstancias a decir “Estoy decepcionado por este motivo”, como si el motivo de la decepción tratásemos de ubicarlo fuera de nosotros antes que dentro.
   Esto es señal de que nos cuesta asumir que si algo nos decepcionó, fue debido a nuestra expectativa previa antes que a los acontecimientos en sí.
   Decir que algo nos ha decepcionado, significa admitir que de alguna manera esperábamos algo que no ha ocurrido o que ha ocurrido de de manera diferente de lo que nos esperábamos: es decir que teníamos una idea previa de lo que nos esperábamos.
   Pero no solamente significa esto. Significa también admitir que sobre la idea previa que teníamos, habíamos emitido un juicio personal polarizando esa idea como algo más o menos positivo, aceptable, o correcto, de acuerdo con una persona, su comportamiento, o una circunstancia.
   Pero hay algo más: decir que algo nos ha decepcionado, significa también admitir que hemos juzgado la realidad de manera personal, sumaria y subjetiva, desde nuestro personal sistema de creencias y valores, o  aquello que ha dicho o hecho esa persona o como se han desarrollado los acontecimientos: que lo hemos comparado con nuestra idea o expectativa previa, y que tras esa comparación, hemos juzgado que lo que ha ocurrido no refleja o no cumple con nuestros criterios previos. O que simplemente es inferior en calidad y beneficio a lo que nos esperábamos.
   Por tanto, todo este proceso que nos lleva a decir que “algo no ha decepcionado”, es fruto de una expectativa arbitraria, imaginada y no real, de un juicio sobre esa expectativa, construido sobre la base de la imaginación, de una comparación entre la realidad efectiva y nuestra imaginación alimentada por nuestras expectativas basadas en simples deseos o necesidades personales y, finalmente, de un juicio sobre la realidad efectiva, basado en esa comparación.
    Lo que no nos damos cuenta es que estamos comparando hechos consumados y objetivos, con  imaginación subjetiva previa.
    Y menos aún nos damos cuenta que a la hora de comparar hechos con imaginación, damos más crédito a la imaginación y creemos que nuestro punto de vista es mejor o más aceptable, o más justo, o con más derecho de razón, respecto a los hechos patentes.
Este proceso representa una falacia en el momento en que damos por sentado y obvio que nuestra expectativa previa, aún siendo algo imaginativo cuenta más o tiene más derecho de existir que los meros hechos patentes.
    Por eso, al decir que  “algo nos ha decepcionado” , estaremos también afirmando que para nosotros,  nuestra expectativa previa tiene más razón e importancia que la mera realidad. Que cuenta más lo que pensamos, que lo que ocurre ahí en el mundo exterior.
   Y al usar como punto de comparación nuestro pensamiento, expectativa o idea previa, decimos caemos también en el autoengaño de creer que esa es la correcta y que si la realidad no coincide o cumple con ella, o la supera, entonces esa realidad habrá hecho algo que no consideramos justo o asumible, ya que nos habrá decepcionado.
  Todo esto es fruto de un egocentrismo cognitivo o conceptual que nos lleva a pensar erróneamente que disponemos de más y mayor razón que la realidad misma.
   Lo que nos resistimos a entender es que la realidad ahí fuera simplemente ocurre, y que nuestro punto de vista y nuestro juicio es lo que la disfraza de algo que nos gusta o nos gusta.
   Y que cuando algo no nos gusta o pensamos que “nos decepciona”, será porque nosotros, con nuestros juicios y nuestras expectativas previas habremos querido que sea así: y que eliminando el juicio, eliminaremos el malestar o la decepción.
   Por este motivo, cuando algo nos decepciona, no habrá sido por lo que habrá hecho o no habrá hecho o habrá dejado de hacer, sino por nuestras expectativas previas que habremos construido de manera sumaria, sin considerar eventualidades como la realidad que finalmente nos abofetea en la cara (ojo, no es la realidad que da la bofetada, sino nosotros que ponemos la cara por donde pasa ella).
   Del mismo modo, si piensas que has decepcionado a alguien, puedes pensar también que no habrá sido por lo que hayas hecho o dicho, sino por las expectativas equivocadas que esa persona tenía.
La causa de su decepción no está en tu comportamiento, sino en las expectativas del otro/a.