(Revista digital de ARTE, CULTURA Y OPINIÓN DESDE ALICANTE. Nuevoimpulso.net
ARTICULOS DE OPINION
Revista digital de arte, cultura y opinión en Alicante. Enlace con POESIA PALMERIANA. En estas páginas no podemos estar ajenos a lo que pasa en España ni en el mundo. Dirigida por el escritor, poeta y pintor Ramón PALMERAL. Los lectores deciden si este blog es bueno, malo, o merece la pena leerlo. El periodismo consiste en decir lo que a algunos no les gustaría leer.
ALICANTE, 13/08/2923.- Hoy hemos entrevistado para nuestra revista cultural al
dibujante y pintor figurativo David Fernández Hidalgo. Nacido en Játiva
(Valencia) en 1974y afincado en
Alicante desde 1990 donde ha desarrollado principalmente su obra plástica.
(David Fernández Hidalgo)
Palmeral- ¿Cuándo comenzaste a pintar? ¿Qué te motivó a
ello?
David- Realmente no tengo recuerdos de cuándo comencé
a dibujar o pintar ya que esa actividad ha formado parte de mí desde que he
tenido uso de razón. Ni siquiera en la adolescencia dejé de dibujar que es
cuando la mayorías de los jóvenes comienzan a dejar de hacerlo.
Lo que sí recuerdo es ver de pequeño los cuadros de mi
abuelo Antonio Hidalgo Peña, pintor profesional, colgados en casa.
También ver a mi padre, Ramón Palmeral dibujar, pintar y crear toda clase de
artilugios de madera con sus manos. Y por su puesto a mi tío Miguel Fernández,
profesor de dibujo y pintura en Málaga. Como puedes ver he estado rodeado de
artistas (sonrisas).
(Autorretrato de David)
P- ¿Qué artistas han sido la mayor influencia en tu
pintura?
D- Yo estudié Bellas Artes en San Carlos (Valencia) y
eso creo que marcó mucho el estilo de pintura y dibujo que hacía a finales de
los 90 ya que fue una formación donde yo buscaba el realismo y la figuración.
En el ambiente académico te ves influenciado por mucho trabajo del natural y te
esfuerzas al máximo por hacerlo bien. Eso me llevó a visitar los principales
museos de la ciudad y conocer así la obra de maestros como Ribera, Ribalta,
Sorolla, Benlliure, Pinazo, Muñoz Degrain o Bernardo Ferrándiz.
Por otro lado desde la niñez he viajado frecuentemente a
Sevilla y Málaga donde vivían mis abuelos, y claro mis padres siempre me han
llevado a los museos. En Sevilla yo destacaría la obra de Murillo, Valdés
Leal o Zurbarán. Y en Málaga la obra de José Gartner de la Peña, FernandoLabrada,Pedro Sáenz Martínez y Enrique SimonetLombardo.
(Óleo "Alejandría" adquirido por la Diputación de Alicante)
P- ¿Cómo fue ganar la Convocatoria 2002 de Artes
Plásticas de la Diputación de Alicante?
D- (Sonrisas) Bueno yo no lo llamaría ganar, lo que
ocurrió más bien fue que al jurado le gustó el paisaje urbano que presenté y
adquirieron la obra para los fondos de la Diputación. La verdad es que fue
motivo de mucho orgullo y satisfacción que el cuadro formara parte de una
Institución pública. Fue la culminación de un proceso que comenzó en mis
primeros años en la facultad de bellas artes, fuertemente influenciado por el
academicismo, la pintura minuciosa y el dominio de la técnica.
(Óleo hiperrealista)
P- ¿Qué te llevó a entrar en 2003 en la Enseñanza
Pública?
D- Siempre admiré a los grandes artistas y maestros
que tuvieron la enorme paciencia de enseñarme a mí, así que pensé en dedicar yo
mi vida profesional a enseñar a otros a dibujar y pintar. Creo que la enseñanza
artística en los institutos estaba bastante anclada en el pasado y eso era
necesario ir cambiándolo poco a poco con otro enfoque. Valoro mucho la
autenticidad de los y las estudiantes y que se les de la oportunidad de
expresar sus propias voces y puntos de vista. Esto empodera al alumnado y les
ayuda a desarrollar confianza en sí mismos.
Trato de transformar la educación convencional incorporando
enfoques creativos, interdisciplinarios y centrados en el estudiante. Eso a su
vez me enriquece a mí como artistas y aprendo mucho de la interacción con los
chavales.
P- Llevas un tiempo presentando tus nuevos dibujos en
Instagram.
D- Realmente siempre he estado dibujando por mi
cuenta, nunca lo que dejado, como decía John Berger, dibujar es
descubrir, es la forma que tengo de entender mejor el mundo que me rodea.
Instagram,@davartportraitme da la oportunidad de exponer
mi trabajo como si fuera una galería virtual, además de ser un medio que me
permite aprender de otros.
P- ¿Qué técnicas estas usando en tus dibujos?
D- La verdad es que me encanta y disfruto mucho todas las
técnicas del dibujo, como siempre suele pasar todos tenemos preferencias, a mí
me gusta el carboncillo, el grafito, los lápices de colores o la técnica de
trois crayons, que es la que estoy usando más ahora mismo.
El presidente ejecutivo de Prensa Ibérica, Javier Moll, da un discurso durante el acto de presentación de EL PERIÓDICO DE ESPAÑA. /
Madrid 11 de octubre del 2021 a las 23:42. Actualizada a las 23:52
Un nuevo medio nacional para impulsar la vertebración de España y dar voz a los territorios. Es el planteamiento con el que ha nacido EL PERIÓDICO DE ESPAÑA, que este martes estrena su edición de papel y que este lunes ha celebrado un acto de presentación oficial en el madrileño Hotel Riu de Plaza de España.
En el evento se ha narrado en vivo la cuenta atrás y el posterior lanzamiento de la página web del medio, que cuenta con una edición en papel disponible en los quioscos de Madrid de lunes a viernes.
Para dar la bienvenida a EL PERIÓDICO DE ESPAÑA se ha congregado un centenar de autoridades del país: ministros, presidentes autonómicos, cargos institucionales y directivos de algunas de las empresas más destacadas del país. En total, unos 400 invitados para recibir al nuevo diario, en una celebración donde se han respetado en todo momento las medidas de seguridad acordes con la situación, como controles imperceptibles de temperatura en los accesos o sistemas de regeneración continua de aire.
El presidente de Prensa Ibérica, Javier Moll, la vicepresidenta, Arantza Sarasola, y el consejero delegado, Aitor Moll,
han protagonizado la recepción de invitados antes de que diera comienzo
la presentación oficial, y el actor José Luis Gómez ha introducido el
evento con una interpretación de fragmentos literarios sobre periodismo
escritos por autores como Mariano José de Larra, Miguel de Unamuno,
Ryszard Kapuscinski o el periodista estadounidense Benjamin Bradlee.
La apertura ha corrido a cargo de la vicepresidenta, que ha destacado la calidad y la independencia informativa como valores fundamentales presentes tanto en la nueva redacción como en los 24 cabeceras
que ya integran en grupo. En su intervención, ha reivindicado “el
derecho a una prensa libre, plural e independiente” como “parte esencial
de nuestra convivencia en democracia”.
En este sentido, Sarasola ha destacado el papel de EL PERIÓDICO DE ESPAÑA como “una cabecera que quiere contribuir al progreso
y que entiende que el el español es un pueblo unido en la riqueza de su
diversidad” y ha subrayado los dos valores que constituyen “una seña de
identidad” en los medios del grupo, como son el rigor en la información
y el compromiso con la sociedad.
Este compromiso social del nuevo medio vendrá marcado por su
carácter “integrador y sensible a las cuestiones sociales”. “El
PERIÓDICO DE ESPAÑA defiende la igualdad de oportunidades entre hombres y mujeres y lucha con toda su energía contra el problema de la violencia de género”,
ha destacado la vicepresidenta, que ha presentado al nuevo diario como
“un periódico con alma, con empatía, con sentido de la justicia”.
Sarasola ha puesto de relieve el desafío que representa la nueva
apuesta periodística para un grupo editorial “que ha cimentado su
desarrollo en el conocimiento profundo de la España plural”. La
empresaria también ha querido dedicar unas palabras de “cariño y
solidaridad” a los afectados por el volcán de Canarias, una tierra que fue la cuna de Prensa Ibérica hace más de 40 años, cuando se puso en marcha esta empresa familiar.
Acto seguido ha intervenido Fernando Garea,
director de EL PERIÓDICO DE ESPAÑA, que ha dedicado sus primeras
palabras a trasladar “toda la ilusión y pasión que hay detrás de este
proyecto”, que nace con el planteamiento de “alejarnos del ruido y del
periodismo declarativo”. “Queremosaportar elementos de
juicio para que los lectores se formen su opinión sobre los temas. No
pretendemos dirigir sus opiniones, ni reforzar sus posiciones y por eso
aportaremos visiones plurales”.
Los
asistentes al acto de presentación de EPE aplauden al director de EL
PERIÓDICO DE ESPAÑA, Fernando Garea, al finalizar su discurso...
Prensa Ibérica despide a Fernando Garea y coloca a Gemma Robles como nueva directora de 'El Periódico de España'
Solamente tres meses después del lanzamiento de la última cabecera del grupo de comunicación
EP
Fernando Garea y Gemma Robles. Fuente: elaboración propia.
Prensa Ibérica ha nombrado nueva directora de 'El Periódico de España' a la periodista Gemma Robles en sustitución de Fernando Garea, a quien el grupo agradece la labor que ha desarrollado en el lanzamiento del proyecto.
Respecto a la trayectoria de Gemma Robles, el grupo ha indicado que
es licenciada en Ciencias de la Información por la Universidad
Complutense de Madrid (UCM) y especialista en información política.
Ha desarrollado la mayor parte de su carrera profesional en 'El
Periódico', medio al que llegó en 2007 y en el que, cuatro años después,
en 2011, fue nombrada delegada de la Dirección en Madrid. Desde
septiembre de 2019 es además directora adjunta. Antes de incorporarse a
'El Periódico', pasó por las secciones de economía y política de Onda
Cero y trabajó para la agencia Europa Press.
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El periodista ha destacado la importancia de los tres pilares que
componen un medio: el editor, la redacción y los lectores. En este
punto, ha asegurado que el grupo editorial liderado por Moll y Sarasola
ha demostrado con creces “que sabe hacer periódicos desde hace tiempo y
que produce contenidos informativos de calidad”. Un grupo que con más de 1.200 periodistas tiene ahora “el reto enorme de armonizar sus contenidos y presentarlos en EL PERIÓDICO DE ESPAÑA”.
El nombre no es casualidad, ha querido precisar Garea, puesto que
el objetivo es “hacer que el nombre del diario sea, precisamente, lo que
queremos que sea: la plataforma de los contenidos de una España plural, diversa y descentralizada
que debemos escuchar mucho más. Y de la que tenemos que servir de
altavoz”. “Por eso decimos –ha continuado– que somos la suma de voces”.
Sobre la redacción, el segundo elemento decisivo, la ha descrito como una “mezcla perfecta de experiencia y juventud.
De talento periodístico y conocimientos técnicos”. Además, ha apuntado
que cuenta “con la misma cantidad de mujeres que de hombres y una media
de edad por debajo de los 40 años”. También se ha dirigido al lector, y
ha situado el objetivo en “merecer su confianza, ser creíbles, ser
diferentes”. “A ellos intentaremos llegar online y en papel, todo un reto en estos tiempos. Una hermosa locura que hoy compartimos con todos ustedes”.
“Un importante valor vertebrador”
El acto de presentación, que ha sido presentado por la periodista
de la casa, Silvia Tomás, se ha cerrado con la intervención del presidente de Prensa Ibérica,
que ha descrito el nuevo medio como la culminación de la estrategia de
desarrollo, con un “recorrido inverso al habitual en la historia de la
prensa en España”. Un diario que pretende ser “la voz de la España real”
y que, con dimensión nacional, “se nutrirá de la información propia que
elaboran los cientos de periodistas que trabajan para las cabeceras del
grupo en los distintos territorios”.
Javier
Moll y Arantza Sarasola, presidente y vicepresidenta de Prensa Ibérica,
en el acto de presentación de EL PERIÓDICO DE ESPAÑA
/ José Luis Roca
Moll ha resaltado el “importante valor vertebrador que nuestros periódicos desempeñan en el Estado de las Autonomías
desde los tiempos de la Transición”. Un estado que considera “pieza
clave en la modernización del país, de su estabilidad institucional y de
su progreso económico y social”, aunque ha asegurado también ser
consciente “de las carencias de las que adolece y que nos obliga a
seguir perfeccionándolo”.
El empresario ha defendido a su vez que “solo el periodismo responsable
y de calidad nos hace libres”. Un medio “exigente consigo mismo” que
“se compromete con la verdad”, regido por los principios de la ética
periodística y “capaz de rectificar el error que cometa”. Al hilo de
estas consideraciones, Moll ha aludido a los periodistas María Ressa y
Dimitri Muratov, Premio Nobel de la Paz 2021, por su trabajo a favor de
la libertad de prensa.
El evento ha concentrado a gran parte de las autoridades del país,
con la presencia de miembros del Gobierno como la vicepresidenta
segunda, Yolanda Díaz; el titular de Presidencia, Félix Bolaños; el de Cultura, Miquel Iceta; la de Educación, Pilar Alegría; el de Universidades, Manuel Castells; la portavoz y ministra de Política Territorial, Isabel Rodríguez; o el secretario de Estado de Comunicación, Francesc Vallès.
Han acudido asimismo al evento autoridades de las Cortes, como el presidente del Senado, Ander Gil, Ana Pastor, vicepresidencia segunda, o Elisenda Guardino, directora de comunicación del Congreso.
En la gala han recalado numerosos presidentes autonómicos, en
consonancia con el planteamiento del propio periódico, que busca abrir
el foco más allá de la capital. Así, entre los asistentes al acto han
estado el líder del ejecutivo andaluz, Juanma Moreno; la presidenta de Navarra, María Chivite; el president de la Generalitat Valenciana, Ximo Puig; la presidenta balear, Francina Armengol; el presidente asturiano, Adrián Barbón; el de la Región de Murcia, Fernando López Miras; el de la Junta de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco; y el canario Ángel Víctor Torres.
La
vicepresidenta segunda del Gobierno, Yolanda Díaz, y el secretario
general del Partido Popular, Teodoro García Egea, conversan durante el
acto de presentación de EL PERIÓDICO DE ESPAÑA.
/ DAVID CASTRO
También han asistido dirigentes locales, como el alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, el de Vigo, Abel Caballero; el de Málaga, Francisco de la Torre, o el de Cáceres, Luis Salaya.
Por parte del mundo judicial, han acudido magistrados del Tribunal
Supremo, la Audiencia Nacional, el CGPJ y distintos Tribunales
Superiores autonómicos.
A nivel nacional, han asistido a la gala representantes de distintos partidos, como Santos Cerdán, secretario de Organización del PSOE, el portavoz parlamentario socialista, Héctor Gómez, Iñigo Errejón, líder de Más País, el portavoz de Cs, Edmundo Bal, o Teodoro García Egea, que ha asistido a la inauguración como máximo representante del PP, acompañado por Martínez-Almeida, que se ha presentado en la fiesta en su doble condición de portavoz nacional del partido y alcalde de Madrid.
Ayuso ha dejado su representación en manos de la consejera de
Cultura, Turismo y Deporte, Marta Rivera de la Cruz, y su escudero en la
Asamblea de Madrid, Alfonso Serrano, que ejerce como
portavoz parlamentario sin dejar de dar una sola batalla ideológica,
siguiendo la estela y la forma de hacer de la presidenta. Bien sabe de
esto Mónica García, portavoz de Más Madrid, que ha
acudido junto a su jefa de gabinete, y que cada martes y jueves
confronta sus ideas con él en el Parlamento autonómico. La presidenta de
la Asamblea, Eugenia Carballedo, también ha acudido al acto.
En el Ayuntamiento, en cambio, casi nadie ha querido perderse la fiesta. La vicealcaldesa Begoña Villacís
se ha sumado al alcalde como cabeza del equipo de gobierno para que
quede claro que en el Consistorio hay una coalición con dos líderes al
frente: un solo equipo, sí, pero dos liderazgos, también. Y la oposición
ha acudido a la llamada de EL PERIÓDICO DE ESPAÑA también casi al
completo. Pese a haber mantenido por la mañana un cruce de reproches con
el alcalde, tanto Mar Espinar (PSOE) como Rita Maestre (Más Madrid) han
departido con el alcalde como compañeros. Y Recupera Madrid, la
escisión local de Más Madrid, también ha buscado su hueco con la
asistencia de José Manuel Calvo.
Foto de familia de Prensa Ibérica y EL PERIÓDICO DE ESPAÑA. /
JOSÉ LUIS ROCA
La representación económica
El evento organizado por Prensa Ibérica ha contado con un telón presupuestario de fondo. Con el proyecto de Presupuestos Generales del Estado recién
remitido al Congreso, y la llegada de los fondos europeos pendiente de
las reformas que se negociarán en las próximas semanas, como la de las
pensiones y la del mercado de trabajo, la inauguración de EL PERIÓDICO
DE ESPAÑA ha reunido a los principales agentes de la vida económica y a
los interlocutores de la mesa del diálogo social. Por el lado del
Gobierno la Vicepresidenta Segunda y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, a quien se le ha podido ver durante la celebración junto al secretario general de Comisiones Obreras, Unai Sordo. Del lado de la patronal, ha acudido el presidente de CEOE, Antonio Garamendi.
El líder sindical y el empresarial han estado charlando
animadamente de camino al salón de actos. Antes, Unai Sordo y el
presidente de la Junta de Andalucía se han saludado e intercambiado unas
palabras; todo después de que hace menos de una semana, miles de
personas llamadas por CCOO y UGT se concentraran ante la sede de la
presidencia del Gobierno andaluz para exigir una recuperación económica
justa y el cambio del modelo productivo.
El presidente andaluz se ha erigido como uno de los principales
animadores del acto, y ha mantenido charlas distendidas con dirigentes
socialistas como Ximo Puig, con quien hizo frente común por la financiación autonómica, o el ministro Iceta, además del portavoz socialista, Héctor Gómez, o el presidente del Senado, Ander Gil.
El mundo de los negocios ha tenido una representación amplísima en
el evento de presentación del nuevo diario de Prensa Ibérica, con la
presencia de ejecutivos de gigantes empresariales como Inditex, Telefónica, Iberdrola, Endesa, Repsol, Cepsa, Mercadona o El Corte Inglés.
El rey de los moriscos. Novela histórica de ficción, ambientada en las guerras civiles de
Granada de 1568-1570. Pero además el autor no revela la existencia de un
biznieto del sultán Boabdil, cristiano nuevo o morisco Diego de Oriola,
nacido en Frixiliana en 1530, que tras una serie de peripecias como
estudiante e Granada, comerciante de seda, pretende por su linaje
competir con Aben Humeya en Las Alpujarras. Acabará en galeras en la
batalla de Lepanto, preso por la Inquisición de Sevilla desde donde
escribe sus memorias. Bajo el recurso del manuscrito encontrado el
narrador en primera persona, nos introducirá en el siglo XVI español,
lleno de picaros, tahúres, moriscos, cristianos viejos, tercios viejos,
clérigos que solamente buscan embargar bienes a los judaizantes,
luteranos y mahometanos. Con el "Rey de los moriscos", Ramón Fernández
Palmeral nos muestra sus amplios conocimientos de la Historia del S.XVI,
cuya erudición la pone en boca de un personaje morisco inolvidable. Es
una narración, ágil, amena y educativa.
En Amazon se publican millones de libros, solamente unos cuanto triunfan. Sin embargo, el autor se tiene que mover, y convertirse en escrito, corrector, editor, distribuido, presentado... y llevar la de aquí para allá, Amazon es una imprenta, no una editorial, no hace nada por los libros, siemreo hay qu estar pagando publicidad.
Las novelas, los libros las vende las editoriales con su marketing (librerías, TV, revistas, entrevistas, publicidad, premios), esto lo hacen con los autores famosos, que tienen asegurada sus ventas. La novela puede ser buena, pero si no tienes a un agente literario, no va a ser posible que salgan al mercado, a las ferias etc.. Luego hay editoriales que te timan, publican el libo en al red, on-line pero los libros no salen a las librerías.
Si es un libro de poetá como el poeta ni sea importante nada hay que hacer,
ELCHE.
Después de los invitados del Patronato del Misteri d'Elx, el
Ayuntamiento de Elche ha hecho públicos los invitados que le
corresponden para los ensayos generales y las representaciones de los
días grandes del drama sacrolírico. Desde las entidades festeras hasta
el vicepresident Vicente Barrera y tres consellers, estos son los
invitados del 11 al 15 de agosto:
11 AGOSTO. 22.30 HORAS
-Mihnea ignat, DIRECTOR Orquesta Sinfónica de Elche
- José Galiano Pérez, Director Conservatorio Elche
- Francisco Maestre Zapata, Director ORQUESTA DE JÓVENES DE LA PROVINCIA DE ALICANTE
- Elia Barceló, Escritora
- Joaquín Buitrago Marhuenda, Presidente Elche C.F
- Anabel Morente, Directora ONCE Elche
- Ginés Juan VICEDO, Decano Colegio Procuradores de Elche
- Juan Pascual Sansano, Presidente Rotary Club Elche
- Laura Vicente Gómez, Presidenta Rotary Club Illice
Azaña No deseaba la Guerra Civil, pero tampoco quiso hacer nada para evitarla. Su
política fue la de dejar hacer, lo más irresponsable y suicida,
entregando toda la iniciativa en manos de los revolucionarios violentos. Una soberbia que no le permitió dialogar, ni admitir consejos para evitar la, inevitable, guerra civil.
Manuel Azaña Presidente de la República y guerra civil
Estandarte presidencial de Manuel Azaña.
El nuevo jefe del Estado trasladó su residencia al palacio de la Quinta
en el Pardo, hecho que pudo haberle costado la vida. Por entonces una
mayoría de oficiales del regimiento de Transmisiones del Pardo estaban
comprometidos en el alzamiento; entre ellos el capitán José Vegas
Latapié, quien había planificado el secuestro de Azaña. Su hermano, el
conspirador y propagandista antirrepublicano Eugenio Vegas Latapié,
también estaba involucrado (de hecho ambos se adherirán a los golpistas
dos meses más tarde), aunque al final el proyecto fue abortado.48
Cuando Roberto Villa y Manuel Tardío, profesores de la Universidad Rey Juan Carlos, publicaron un libro minucioso sobre el fraude de las elecciones de febrero de 1936, el academicismo guardó silencio.
Luego se pronunciaron los santones: aquello era una falsedad
“franquista”, propia de la “ultraderecha”, que no tenía en cuenta el
contexto ni la intención. Fue un anatema porque esos historiadores progresistas sostienen que la legitimidad está en la intención,
en la búsqueda de un supuesto “bien común” aunque no comulgue con las
actuaciones. Es decir; que se podía pisotear la democracia, los derechos
individuales y la vida de los adversarios porque sus perpetradores
soñaban con el establecimiento de una utopía comunitaria. De nuevo, la
fe contra la razón, el dogma contra la ciencia, la ideología frente a la
demostración empírica.
Con el trasfondo de una conspiración militar en marcha y una
movilización obrera y campesina, Azaña encargó la presidencia del
gobierno a Santiago Casares Quiroga,
que formó uno exclusivamente republicano, y entró en la dinámica
institucional de su nuevo cargo, sin hacer mucho caso de todo lo que
estaba fraguándose.49
Así, cuando el golpe de Estado se produjo, el gobierno se hundió casi
inmediatamente. Casares Quiroga dimitió la tarde del 18 de julio y
Azaña, desde el Palacio Nacional (actual Palacio Real, adonde había sido trasladado por seguridad), encargó rápidamente al presidente de las Cortes, Diego Martínez Barrio,
que formase un gobierno que incorporase a elementos de la derecha y que
no incorporase a comunistas. Sin embargo, el PSOE, por boca de
Indalecio Prieto (pero siguiendo la estrategia de Largo Caballero), se negó a participar en tal gobierno. Con todo, el 19 por la mañana tenía formado un gobierno con miembros de Izquierda Republicana, Unión Republicana y el Partido Nacional Republicano (sin socialistas ni comunistas, por tanto).
Martínez Barrio llegó a hablar con algunos de los generales sublevados (Cabanellas y Mola),
pero no hubo vuelta atrás. Además, tanto socialistas como
anarcosindicalistas y comunistas, rechazaron también cualquier tipo de
vuelta atrás y reclamaron las armas para hacer frente a la sublevación,
negándose a reconocer al nuevo gobierno. Martínez Barrio dimitió el
mismo día 19. Azaña reunió, entonces, a los partidos con el objeto de
buscar una solución satisfactoria para todos. Largo Caballero supeditó
la participación socialista al reparto de armas a los sindicatos y a la
licenciación de todos los soldados. Azaña encargó entonces la formación
del gobierno a José Giral,
que formó uno exclusivamente republicano y que asumió el reparto de
armas. El 23 de julio Azaña dirigió por radio una alocución al país en
la que animó y agradeció su esfuerzo a los que defendían la República,
reivindicando su legitimidad y condenando a sus agresores. Sin embargo,
simultáneamente a estas exteriorizaciones,
quienes le habían visitado unas semanas antes y
volvían ahora para charlas de nuevo con él comprobaron un rápido
envejecimiento, una acusada palidez en su rostro, un evidente cansancio,
un temblor de emoción en la voz cuando evocaba las atrocidades de los
insurgentes y el sacrificio del pueblo, aunque hablara sin rencor y sin
mostrar ningún ánimo de venganza.50
A principios de agosto, al saber que Francia y el Reino Unido no iban
a apoyar a la República con armas, Azaña se convenció de que no habría
forma de ganar la guerra. El 22 de agosto la cárcel Modelo de Madrid fue asaltada por una multitud y resultaron asesinados varios amigos personales de Azaña, entre ellos Melquíades Álvarez. Como resultado de todo, al día siguiente Azaña se planteó dimitir, aunque Ángel Ossorio y Gallardo
le ayudó finalmente a reconsiderar su intención. Por lo demás, un nuevo
problema se hizo visible en España: la indisciplina, la fragmentación
del poder y las ansias de revancha.
El desorden generalizado provocó que a principios de septiembre
José Giral dimitiese y con él todo el gobierno. Giral recomendó un
gobierno que, por su influencia en el pueblo, incluyese al sindicalismo;
Azaña, a pesar de considerar a los sindicatos como los principales
responsables del caos, terminó por aceptar al líder de la UGT, Largo
Caballero, como presidente del gobierno. El nuevo gobierno de coalición
estaba formado por socialistas, republicanos, comunistas y un miembro
del PNV.
Ante la proximidad del ejército de Franco a Madrid, el gobierno decidió
que Azaña se trasladase de Valencia a Barcelona. Antes de marcharse
pronunció un importante discurso en el Ayuntamiento de Valencia el 21 de
enero de 1937 en el que dijo: «Nosotros hacemos la guerra porque nos la
hacen». Seis meses después, el 17 de julio (primer aniversario del
inicio de la guerra), pronunció otro discurso significativo en la Universidad de Valencia:51
Tenemos que habituarnos otra vez unos y otros a la
idea, que podrá ser tremenda, pero que es inexcusable, de que los
veinticuatro millones de españoles, por mucho que se maten unos con
otros, siempre quedarán bastantes, y lo que queden tienen necesidad y
obligación de seguir viviendo juntos para que la nación no perezca.
A finales de octubre, estableció su residencia y despacho en el Palacio de la Ciudadela.
Desde allí, en el mismo mes de octubre y previendo un difícil triunfo
republicano, intentó, a través de los embajadores en Inglaterra y
Bélgica, que se mediase ante los británicos para conseguir el final de
la guerra y que así los españoles pudiesen decidir su futuro
pacíficamente. Sin embargo, el ambiente favorable al levantamiento en
ambos países dio al traste con el intento. El 2 de noviembre Azaña
cambió su residencia al monasterio de Montserrat. Allí recibió la noticia de que Largo Caballero había concedido cuatro ministerios a la CNT,
en parte gracias a un malentendido entre Azaña y Giral, que había
mediado en el asunto. Azaña se molestó (contrario como era a encomendar a
sindicatos cargos políticos), y le expuso al presidente su especial
oposición a la presencia de ministros del FAI, pero no hubo vuelta atrás.
A lo largo de los siguientes meses, Azaña tuvo que resistir
diferentes acometidas de su estado de ánimo ante los acontecimientos que
se estaban desarrollando, pero resistió sin abandonar su cargo por
diversas razones:
la primera fue su claro y contundente repudio a la
rebelión, que definió desde el principio como una agresión sin ejemplo,
como horrenda culpa, un «crimen no de lesa patria, sino de lesa
humanidad», echando en cara a sus responsables el delito de haber
desgarrado el corazón de la patria. Nunca encontró justificación ni
explicación alguna para ese delito: «aunque hubiesen sido ciertos todos
los males que se cargaban a la República no hacía falta la guerra. Era
inútil para remediar aquellos males. Los agravaba todos, añadiéndoles
los que resultan de tanto destrozo». La segunda (...) fue su respeto por
los combatientes. (...) la tercera (...) es la causa misma de la
República (...) la República era la ley, el orden, la convivencia, la
democracia y a esos valores había entregado su vida.52
Azaña vivió durante varios meses en reclusión y tristeza entre
Montserrat y Barcelona, y al margen del Gobierno republicano.
Finalmente, en diciembre del 36, Ángel Ossorio lo animó a acercarse a
Valencia, a lo que Azaña accedió.
En enero de 1937 pronunció un discurso en el Ayuntamiento de Valencia
en el que destacó que, aunque la guerra era, en su origen, un problema
interno debido a la rebelión de una gran parte del ejército contra el
Estado, por la presencia de fuerzas de distintos países se había
convertido en un grave problema internacional. Y que España estaba
luchando, por tanto, también por su independencia nacional. En este
sentido, insistió en sus gestiones para que la firma de un cese de
hostilidades facilitase la salida de las potencias extranjeras de España
y, de paso, un restablecimiento de relaciones entre las partes en
conflicto para, finalmente, llegar a un referéndum que aclarase el
futuro.
Manuel Azaña y Juan Negrín a las afueras de Barcelona en 1937, en aquel momento sede del Gobierno de la República Española.
De vuelta a Cataluña, se trasladó a vivir a Barcelona, aunque hizo
frecuentes visitas a Valencia, donde tenía su sede el gobierno. Pensó en
un plan, que comunicó a varios miembros del gobierno (el cual lo
compartía en marzo de 1937), que consistía en el bloqueo de armas y de
contingentes, y el reembarco de los combatientes extranjeros con una
suspensión de armas, para la que sería necesaria la intervención del
Reino Unido y de Francia; no recibió la atención necesaria por parte del
gobierno y finalmente quedó en nada.53
A principios de febrero de 1937 tenía también en mente que la
única forma de reconducir la situación de fracaso en la guerra era
conseguir sacar del gobierno a los sindicatos y dejarlo en una coalición
de comunistas, socialistas y republicanos. El mismo Stalin
hizo llegar su queja de que la guerra no se tomaba en serio y que no
había disciplina militar. La insurrección anarquista en Barcelona de
mayo recrudeció la separación entre Azaña y el gobierno de Largo
Caballero, que se mantuvo bastante pasivo respecto de la revuelta, hasta
el punto de que Azaña pensó otra vez en dimitir. Azaña, con todo,
siguió, y posteriormente manejó una nueva crisis de gobierno con vistas a
conseguir que Largo Caballero abandonase la presidencia del gobierno,
lo que conseguiría gracias a la presión conjunta de socialistas y
comunistas, y la aquiescencia de republicanos.
Aunque se esperaba que el sustituto fuese Indalecio Prieto, Azaña optó por Juan Negrín al no fiarse de los altibajos anímicos del primero54
y por parecerle este más apto para dirigir un gobierno de coalición,
dadas sus relaciones correctas con todas las fuerzas políticas. Con
todo, la razón decisiva fue entender que Negrín era el político más
adecuado para intentar, una vez más, una salida a la guerra a través de
la mediación internacional, que en el momento del cambio de presidente,
mayo de 1937, tenían mejores perspectivas que en ocasiones anteriores.
Sin embargo,
la propuesta de un plan de intervención de las
potencias extranjeras que dejara la guerra en tablas (...) no entraba
para nada en el horizonte de los mandos insurgentes ni de sus aliados
eclesiásticos que, para entonces, ya habían redescrito el «alzamiento»
como una «cruzada» que solo podría acabar con la liquidación y el
exterminio del adversario.55
Por esas fechas, Azaña se instaló en la Pobleta, una finca cerca de Valencia, donde inició lo que más tarde denominaría el Cuaderno de La Pobleta. Memorias políticas y de guerra, donde registró multitud de conversaciones con distintas personalidades del momento.
Manuel Azaña (acompañadp de Juan Negrín y del general Miaja) pasa revista a las tropas acuarteladas en Alcalá de Henares, en noviembre de 1937.
Al nuevo gobierno le señaló las que consideraba prioridades del
momento: la defensa del interior (con especial mención a Cataluña, donde
era necesario restablecer la autoridad del gobierno) y no perder la
guerra en el exterior. Respecto de esto último, en un nuevo discurso
pronunciado el 18 de julio, volvió a criticar abiertamente la pasividad
del Reino Unido y Francia en relación con la guerra en España. En
noviembre de 1937 se acercó a Madrid
y en el ayuntamiento pronunció un nuevo discurso, ahora muy centrado en
los aspectos morales de la guerra y en su realidad y consecuencias
calamitosas para todos, algo que comprobó emocionado cuando, al día
siguiente, visitó Alcalá.
En diciembre se trasladó otra vez a Cataluña, ahora cerca de Tarrasa,
en la finca La Barata, junto, como siempre, a su mujer y sus
colaboradores más cercanos. Insistió en el armisticio, pero ahora tanto
el comité central del Partido Comunista
como Franco expresaron su rechazo al mismo; por lo demás, el gobierno
de Negrín tampoco parecía aceptar ya esa posibilidad. Tras la ofensiva sobre Teruel y el derrumbe del frente de Aragón,
Franco llegó al Mediterráneo en abril de 1938. Azaña se reafirmó en su
idea de la imposibilidad de ganar la guerra y que, por tanto, cualquier
esfuerzo en la dirección de conseguir el triunfo militar estaba
condenado al fracaso. Así, pues, la frustrada ofensiva de la República
en el terreno militar, que obviaba la idea defensiva que propugnaba
Azaña para forzar la intervención extranjera, terminó por hacer perder
toda esperanza de que esta se llegase a producir.
A finales de febrero de 1938 había expuesto con claridad al
embajador de Francia la necesidad de acabar con la guerra de inmediato.
En este sentido, propuso que Francia y el Reino Unido se hiciesen con las bases navales de Cartagena y Mahón para equilibrar las que tenía el ejército de Franco en Ceuta, Málaga y Palma;
la contrapartida sería la búsqueda de la paz en España. El corte de
comunicaciones entre Barcelona y Valencia puso en un aprieto al
gobierno, y Negrín hubo de pedir ayuda directamente a Francia el 8 de
marzo. La situación empeoró en España y hubo de volver en una semana con
una propuesta de mediación del gobierno francés. El gobierno de Negrín
no consiguió ponerse de acuerdo en relación con ella, en parte porque el
propio Negrín, por ejemplo, estaba convencido de la victoria, y fue
rechazada el 26 de marzo. Azaña pensó en sustituir a Negrín al frente
del gobierno, amparándose en las críticas que recibía por su relación
con los comunistas, que había provocado en parte la salida de Prieto del
gobierno, y la situación de la guerra en general. A primeros de abril,
Azaña convocó al gobierno con la esperanza de poder salir de la misma
con Negrín destituido, pero no fue posible. Su posición quedó, en fin,
debilitada, hasta el punto de que Prieto hubo de convencerle de que no
dimitiese
porque su dimisión lo desmoronaría todo; porque usted personifica la República que respetan los países no aliados de Franco.56
Con todo, su desilusión era tan grande que a mediados de ese mismo
mes envió un giro por valor de un millón de francos franceses a Cipriano
de Rivas (que convertiría a dólares oro) para ir preparando el
destierro de su familia en Francia. Para el primero de mayo se presentó
una declaración de trece puntos firmada por el Gobierno de la unión nacional
en la que se subrayaba como objetivos, entre otros, defender la
independencia de España de toda potencia extranjera y establecer una
República democrática, y anunciaba una gran amnistía para quienes
quisiesen colaborar en ello.
El 18 de julio de 1938, en el edificio de las Casas
Consistoriales de Barcelona, pronunció un célebre discurso en el que
instaba a la reconciliación entre los dos bandos, bajo el lema Paz, piedad y perdón.
El núcleo del discurso fue la expresión de su idea de cuál estaba
siendo el daño más grave que la guerra estaba provocando en España:
un dogma que excluye de la nacionalidad a todos los
que no lo profesan, sea un dogma religioso, político o económico, [al
que opone] la verdadera base de la nacionalidad y del sentimiento
patriótico: que todos somos hijos del mismo sol y tributarios del mismo
arroyo.57
Sobre los nacionalismos vasco y catalán declaró:
Y si esas gentes van a descuartizar a España,
prefiero a Franco. Con Franco ya nos entenderíamos nosotros, o nuestros
hijos, o quien fuere, pero estos hombres son inaguantables. Acabarían
por dar la razón a Franco atribuyéndoselo a Negrín.
A finales de ese mes, mantuvo una conversación con John Leche,
encargado de negocios británico, en la que ofreció la cabeza de Negrín y
la salida de los comunistas del gobierno a cambio de una intervención
británica imponiendo la suspensión de armas. La respuesta británica fue
la que ya había sido hasta el momento: su política era la no
intervención. La derrota en la batalla del Ebro
precipitó los acontecimientos al hacer entrar en crisis continuada al
gobierno. El 13 de enero de 1939 recibió Azaña un aviso del general Hernández Saravia
en el que le pedía que se marchase de España. El 21 abandonó Tarrasa
junto con su familia y diversos colaboradores, y se dirigió en primer
lugar a Llavaneras y después al castillo de Peralada,
adonde llegó el 24. Allí se enteraron de que Barcelona había sido
tomada por el ejército de Franco. El 28 recibió la visita de Negrín y
del general Rojo,
el jefe del Estado Mayor, quien presentó un informe que planteaba un
plan de rendición y un trasvase de poderes entre militares. Azaña le
pidió a Negrín, que parecía estar de acuerdo, que reuniese al gobierno
para tomar una decisión. Sin embargo, dos días después el presidente del
gobierno regresó, pero haciendo notar a Azaña que su idea era seguir
resistiendo hasta el final.
Una vez que el gobierno francés abrió paso a civiles y militares
por la frontera, entre el 28 de enero y el 5 de febrero, Azaña, su
familia y sus colaboradores se dirigieron hacia ella. Se desviaron de la
carretera principal hacia La Bajol y allí se reunió con Jules Henry
el 4 de febrero para comunicarle que no estaba de acuerdo con la
decisión de Negrín de continuar la resistencia; insistió, una vez más,
en la necesidad de que Francia e Inglaterra, con el apoyo de Estados
Unidos, interviniesen en el final, presentando un plan de paz a Franco
que, básicamente, facilitase el trato humanitario a los vencidos,
incluidos los dirigentes políticos y militares de la República.59
Negrín no aceptó porque, independientemente de su insistencia en
continuar la guerra, entendía que Franco no aceptaría nunca ese tipo de
paz.
Ese mismo día 4, Negrín le comunicó personalmente que era
decisión del gobierno que Azaña se refugiase en la embajada de España en
París hasta poder organizar su regreso a Madrid. Azaña dejó claro que,
tras la guerra, no había vuelta posible a España.
El 5 de febrero reanudaron el viaje hacia el destierro. En total,
eran unas veinte personas, yendo los de más edad en coches de la
policía. Antes de llegar a lo alto de un puerto, uno de los coches se
estropeó e, impidiendo el paso a los demás, obligó a continuar el camino
a pie, llegando al amanecer. Atravesaron la frontera por el puesto de
aduana; iban, entre otros, Azaña, su esposa, Negrín, José Giral,
Cipriano de Rivas y Santos Martínez. Descendieron hacia Maureillas-las-Illas por una barrancada helada.
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Checas, buques prisión de la República. Por no habla de Paracuellos, y quema de inglesias y convento, como los nazis contra semitas judíos.
Los barcos que se convirtieron en checas en Cataluña
Los puertos de Barcelona y Tarragona fueron transformados en centros de tortura y destrucción
Imagen del barco-prisión "Río Segre".La Razón
No hizo nada para evita la guerra civil. Su soberbia desprecio el ruido de sabe de los militares africanistas.
De todas las figuras públicas españolas del siglo XX, Manuel Azaña es el político de izquierdas más prestigioso y comentado. Su carrera política fue notable a lo largo de ocho años, que fueron los más dramáticos de toda la historia contemporánea de España. Durante la mayor parte de su vida fue funcionario civil y escritor. Nunca tuvo un trabajo remunerado fuera de la Administración pública. Como escritor, en cambio, tuvo un talento indudable, pero, a pesar de sus dotes, no logró más que fracasos al faltarle capacidad creadora. Destacó escribiendo de política y, especialmente, sobre sí mismo, viviendo en la torre de marfil de su propia personalidad y subjetivismo.
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Su obra culminante no fue ninguna obra literaria, sino su diario personal sobre los acontecimientos políticos de su vida en la República y la Guerra Civil, en los que se muestra elocuente y mordaz, aunque escueto en su estilo, siendo sin duda uno de los más notables diarios políticos de cualquier figura europea del siglo XX. La calidad sobresaliente es por el sentido de superioridad y la crítica de sus adversarios y de sus propios colegas. La ironía, muchas veces sutil y exacta, y también pintoresca con que los describió, no tiene desperdicio y merece un lugar especial entre la literatura burlona y sarcástica de la época.
Naturalmente, estos escritos no contienen ni una sola palabra directa de verdadera autocrítica, aunque sí mucha desilusión con su propia obra, por la que no aceptó nunca la menor responsabilidad, echando la culpa a los demás. Reflejan, además, la complacencia ombliguista típica de su personalidad caracterizada por la soberbia, algo común a otros muchos políticos españoles de la época, desde Alcalá-Zamora hasta Franco. Este factor en sí solo explica una parte del desastre nacional de la década trágica en la que España fue dirigida por unos líderes muy sectarios y Manuel Azaña, entre todas las figuras públicas españolas del siglo XX, destaca como el político de izquierdas más renombrado y comentado. Su carrera política abarcó ocho años, los más tumultuosos en la historia contemporánea de España. Aunque gran parte de su vida transcurrió como funcionario civil y escritor, nunca desempeñó un empleo remunerado fuera del ámbito público. Aunque demostró un innegable talento como escritor, no logró más que fracasos al carecer de habilidades creativas. Su enfoque se centró en temas políticos y, sobre todo, en sí mismo, viviendo en la soledad de su propia personalidad y subjetividad.
Las noticias relacionadas muestran diversos momentos de la vida de Azaña:
En 1928, se le encuentra de vacaciones en el Palacio de Aranjuez.
El Congreso de los Diputados le rinde homenaje en el 80 aniversario de su fallecimiento.
Tras las elecciones municipales de 1934, realiza una visita a Cataluña.
La obra más destacada de Azaña no es literaria, sino su diario personal que relata los eventos políticos durante la República y la Guerra Civil. En este diario, se muestra elocuente y mordaz, empleando un estilo conciso que lo convierte en uno de los diarios políticos más sobresalientes de Europa en el siglo XX. Su calidad resalta en la forma en que critica a sus adversarios y colegas, utilizando una ironía a menudo sutil y precisa, que encuentra su lugar entre la literatura burlona y sarcástica de la época.
No obstante, en estos escritos no se halla una sola palabra de autocrítica genuina. Aunque expresan su desilusión con su propio trabajo, nunca asume la menor responsabilidad, atribuyendo la culpa a otros. Además, reflejan la autoindulgencia y soberbia que caracterizaban su personalidad, un rasgo compartido por muchos políticos españoles de ese tiempo, desde Alcalá-Zamora hasta Franco. Esta característica, en sí misma, contribuye a explicar una parte de la catástrofe nacional durante esa trágica década, en la cual España fue dirigida por líderes sectarios y complacientes, con poco interés en comprender a sus adversarios.