El Mentiroso y su corte del absurdo
En la Cadena SER, El Mentiroso vuelve a dar titulares de esos que ya ni sorprenden. Dice, con toda naturalidad, que “posiblemente” cobró en efectivo de la caja del PSOE, pero que, tranquilos, que era “legal”. No aclara cuánto ni cuántos sobres, pero asegura que todo estaba en regla. Claro, porque si lo dice él, debe ser verdad.
Mientras tanto, también comenta que no tiene por costumbre felicitar a los Premios Nobel, ni siquiera al de la Paz, en este caso Corina Machado, para no enfadar a Maduro. Es decir, la diplomacia selectiva: callar ante las dictaduras amigas, no vaya a ser que se molesten.
Y entre tanto, deja caer que quizás presente los Presupuestos antes de fin de año, aunque si no le da tiempo, no pasa nada: se prorrogan los actuales y todos contentos. Esa tranquilidad solo se puede tener cuando uno gobierna sin rendir cuentas y con una buena dosis de cara dura.
Mientras tanto, Óscar Puente, en su cruzada personal, publica una foto del metro de Madrid haciéndola pasar por un desastre, intentando desprestigiar a la gestión de Ayuso. Resulta que la foto ni siquiera era de aquí. Pero claro, en su entorno eso da igual, porque Yolanda Díaz traga con todo, desorientada, fuera de órbita y sin rumbo.
Y mientras tanto, Cerdán está en la cárcel y Ábalos a punto de entrar, y parece que no pasa absolutamente nada. La normalidad política del país del “todo vale”.
¿Tiene jeta? No, tiene un máster en ello.