ARTICULOS DE OPINION


Revista digital de arte, cultura y opinión en Alicante. Enlace con POESIA PALMERIANA. En estas páginas no podemos estar ajenos a lo que pasa en España ni en el mundo. Dirigida por el escritor, poeta y pintor Ramón PALMERAL. Los lectores deciden si este blog es bueno, malo, o merece la pena leerlo. El periodismo consiste en decir lo que a algunos no les gustaría leer.

domingo, 6 de julio de 2025

Pedro Sánchez o el hombre que no sabái nada

 


El hombre que no sabía nada de nada

En el corazón de la política española se encuentra un personaje cuya figura ha sido descrita muchas veces como camaleónica. Se trata del actual presidente del Gobierno y secretario general del PSOE, Pedro Sánchez. Este hombre, que ejerce un doble papel de líder de partido y jefe del Ejecutivo, ha demostrado una extraordinaria capacidad para adaptarse al entorno, tanto en el fondo como en la forma.

En los mítines se presenta con camisa vaquera azul obrera, queriendo adoptar el aspecto de un obrero cercano al pueblo; otras veces aparece con la cara pintada en gestos simbólicos, y en Bruselas o ante la OTAN y la ONU viste impecable con traje y corbata, proyectando la imagen institucional que exige el escenario internacional. Esta versatilidad le ha valido comparaciones con figuras del pasado, incluso con ciertos guiños estéticos que recuerdan a los falangistas de los tiempos de José Antonio Primo de Rivera. Es, en definitiva, un político de muchas máscaras.

Sin embargo, lo que genera mayor inquietud no es su estilo o su imagen, sino su actitud ante asuntos de gravedad política. Sorprende –e indigna a muchos– que alguien que ostenta el mayor cargo de responsabilidad en el país afirme no saber nada de nada sobre cuestiones tan sensibles como las presuntas mordidas relacionadas con Santos Cerdán, uno de sus hombres de confianza y enlace en negociaciones con Bildu y Junts. Cerdán no actuaba como un lobo solitario; seguía directrices claras, y todo apunta a que estas emanaban del núcleo de poder, del entorno directo de Pedro Sánchez. Actualmente está preventivo en Soto del Real por supuesta corrupción. Se celebra el Congreso del PSOE en Madrid.


Pretender que el presidente, con acceso a toda la información del Estado, no supiera nada de estos movimientos, no resulta creíble. Nadie se traga que, con la maquinaria de inteligencia, 600 asesores y control político ministerial que lo rodea, Pedro Sánchez estuviera completamente al margen (enterándose de las mordidas por la prensa). La incredulidad crece entre los ciudadanos, quienes observan cómo se dibuja una sonrisa impostada, casi clerical, como la de un monaguillo que quiere parecer inocente, cuando la realidad apunta a una calculada estrategia de ocultamiento o, peor aún, de complicidad silenciosa.

 

                    (También le gusta usae la camisa vaquera con bolsillos colo azul falangista)

 

Lo que queda en evidencia es que "el hombre que no sabía nada de nada" probablemente sabía más de lo que dice. Y esa negación de la evidencia, ese silencio disfrazado de ignorancia, erosiona la confianza en las instituciones y refuerza la percepción de que la política, más que un servicio público, se ha convertido en un teatro donde cada gesto está pensado, pero no necesariamente en beneficio del país. La oposición no es su enemigo, su enemigo es él mismo. La oposición (ahora gestionada por al derecha) tiene la obligación  legítima y constitucional de fiscalizar al poder Ejecutivo.

Editorial de Nuevo Impulso.net