La estrategia política de Pedro Sánchez
La estrategia política del presidente Pedro Sánchez parece centrarse en consolidar su posición mediante la confrontación con sus opositores, especialmente con el Partido Popular (PP) y Vox (Feijóo y Abascal). En su discurso, suele calificar a ambos partidos como representantes de la “ultraderecha”, e incluso, en algunos casos, se les asocia con ideologías extremistas como el fascismo o el nazismo.
Sin embargo, esta estrategia obvia con frecuencia una autocrítica hacia su propio entorno político. El actual bloque que respalda al Gobierno —formado por el PSOE, Sumar, Podemos, Compromís, Bildu, Junts y ERC— muestra, en ciertos aspectos, una orientación claramente vinculada a la izquierda más radical, es decir la "ultraizquierda" que es la que gobierna en España actualmente. Algunos sectores consideran que estas formaciones, cuando alcanzan el poder, tienden a limitar o condicionar el debate público, reduciendo el espacio de la elecciones para la disidencia y la crítica ciudadana.
Históricamente, en la antigua Grecia, las luchas políticas extremas podían conducir incluso a la eliminación directa del rival. En la España de 1936, figuras como José Antonio Primo de Rivera o Calvo Sotelo fueron víctimas de esa polarización violenta del odio de los republicanos de izquierda. Hoy, sin llegar a esos extremos ejecutivos, la confrontación se libra por otros medios: principalmente, a través del control del relato mediático en las televisiones (caja boba). Los medios de comunicación, y en particular la televisión y los programas de debate, son a menudo utilizados como herramientas políticas que refuerzan el discurso del poder, moldeando la opinión pública a su favor.
En este contexto, la estrategia de Sánchez podría entenderse como un intento de dividir el escenario político entre "ustraizquierda" autodenominados “progresista” y “ultraderechistas” confundiendo a la derecha conservadora y el centros con los extremos, simplificando así el debate y reforzando su liderazgo dentro de su bloque ideológico.
Ramón Palmeral
Alicante, 10-11-2025